SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Concejales de todos los bloques convinieron ayer que el análisis del organigrama de personal de planta del municipio les llevará un arduo trabajo y será "imposible" convertirlo en ordenanza antes de la elección del 18 de mayo.

Esa conclusión echa por tierra con las urgencias del Ejecutivo, que a pedido del Soyem había reclamado un tratamiento preferencial con plazo máximo de 45 días, en uso de un derecho que le asigna el artículo 44 de la Carta Orgánica.

En la sesión del jueves el oficialismo impuso esa figura para el proyecto de organigrama y desestimó los planteos de la oposición, que propuso tratarlo con más tiempo para evitar que el proyecto resulte "politizado" por la campaña.

Pero ayer la complejidad del tema convenció a todos de que no habrá manera de darle trámite en pocas semanas. Contribuyó a esa interpretación el dictamen de la asesora letrada del cuerpo, Alexa Dal Bianco, quien observó que al proyecto le faltan los manuales de misiones y funciones de algunas áreas y en otras incluye contradicciones y falencias que deben ser analizadas en detalle.

El municipio encuadra hoy a su personal bajo un organigrama aprobado en los años '80. El proyecto para modificarlo surgió a partir de un largo proceso de elaboración y en realidad el intendente Darío Barriga debió reenviarlo, ya que el CD anterior lo tuvo en tratamiento durante meses hasta que perdió estado parlamentario.

La edil radical Laura Alves explicó que en las comisiones de Economía y de Gobierno y Legales discutieron la "metodología" y acordaron dividirse en grupos para realizar un "trabajo de campo" con el proyecto, a fin de visitar cada área . El propósito es constatar el modo de funcionamiento de cada lugar de trabajo y determinar cuánto personal necesita.

Hoy el municipio tiene más de 1.500 empleados y mientras algunos jefes y directores se quejan por la falta de personal. "Es imposible hacer un trabajo serio en 45 días", admitió Alves, aun sabiendo que el gremio pretende una rápida aprobación. Hizo notar que si bien el Frente para la Victoria comparte esa premura, no cuenta con los votos para sancionarla en breve plazo.