NEUQUÉN (AN)- "No hay alternativa, les tienen que dar 25 años de cárcel", afirmó Patricio Durán Soto respecto de los dos acusados del asesinato de su hermano Richard. Mañana, la Cámara Criminal Segunda dará a conocer la sentencia contra los imputados Jorge Altamirano y Rafael Pichún.
Patricio dijo a "Río Negro" que en el juicio oral "los testigos ratificaron todo, los reconocieron, los identificaron (a los imputados), no se contradijeron. Y fueron muchos testigos. En el caso Zarza lo condenaron (a Nicolás Rinaldi) a 21 años sin tener ni uno solo".
Contrapuso la "solidez" de los testigos de la acusación con los que presentó la defensa. "Fueron paupérrimos, impresentables. Uno que supuestamente iba a confirmar la coartada de Altamirano dijo que estaba durmiendo con la esposa en la casa".
"Lo único que hicieron los defensores -agregó- fue ensuciar el nombre de mi hermano. Inventaron la historia de que le pegaba a la novia, de que era violento. Nada que ver. Mi hermano no empezó la pelea, está claro que la empezaron ellos".
Patricio reiteró que "no estoy de acuerdo con la magnitud de las penas que fija la ley, por eso pido el máximo posible, 25 años de cárcel para cada uno".
Invitó "a toda la sociedad" a movilizarse el lunes al mediodía a la Cámara Segunda, "porque a cualquiera le puede pasar lo que le sucedió a mi hermano".
Richard Durán Soto fue asesinado el 21 de enero del año pasado a las 6:30 en la céntrica esquina de Rivadavia y Buenos Aires. De acuerdo con la acusación, Altamirano lo apuñaló con un cuchillo de grandes dimensiones con el cual también hirió de gravedad a la novia, Azul Cano. El arma se la habría pasado su amigo Pichún, quien lo esperaba al volante de una moto en la cual huyeron.
Al término del juicio oral el fiscal Rómulo Patti pidió una condena de 22 años de prisión para los dos imputados, uno como autor y el otro como partícipe necesario. El querellante Ricardo Cancela, en nombre de la madre de Richard, reclamó 25 años de prisión por los mismos delitos.
El defensor Jorge Larrea, en cambio, reclamó la absolución de Altamirano por falta de pruebas y lo mismo hizo el abogado Jorge Mena respecto de Pichún. Pero también plantearon la posibilidad de que se aplique la figura de "exceso en la legítima defensa" ya que su teoría del caso es que Altamirano se defendió de un ataque a golpes.
El inicio de la lectura de la sentencia, que se prevé extenso, está programado para mañana a las 12 en la sede de la Cámara, Yrigoyen 153. Estará a cargo de los jueces Héctor Dedominichi, José Andrada y Emilio Castro.
