CIPOLLETTI (AC).- Luego de la sanción de la ley que convierte en delito a las picadas realizadas en lugares no permitidos y las sanciona con penas de hasta tres años de cárcel, los municipios de la región empezaron a evaluar las metodologías de control que se aplicarán. Uno de ellos es el cipoleño, cuyos inspectores de tránsito ya trabajan personal policial.
Otra situación a revisar es la que se registra desde desde hace unos años en la Isla Jordán. En una de las rectas del autódromo ubicado en el predio que la subcomisión de automovilismo del club Cipolletti tiene, habitualmente se corren picadas.
Habilitación comunal
La actividad está habilitada por la comuna y como la ley aprobada por el Senado establece penas para quienes organicen y/o participen en este tipo de actividades en lugares "no permitidos", lo que se realiza en la Isla Jordán no estaría fuera de la ley.
"Ésta es una actividad privada pero hasta ahora siempre han presentado seguros para los espectadores y los corredores, hay ambulancia y personal policial. Vamos a analizar en profundidad la ley y a partir de ahí vamos a determinar qué formas de control se van a aplicar", comentó el secretario de Fiscalización y Organización Interna, Néstor Curcio.
De igual modo se pronunció el director de Deportes Mario Di Franco. "Con la ley en mano, se va a reglamentar y se va a adecuar a nuestra realidad. Nosotros vamos a inspeccionar a fondo el autódromo para determinar si está en condiciones de realizar este tipo de actividades. Si no cumple con las medidas de seguridad, no lo habilitaremos más", aseguró.
En su última sesión, la Cámara de Senadores aprobó la modificación del Código Penal para convertir en delito a las picadas que se realizan en las calles.
En este sentido se establecieron penas de seis meses a tres años e inhabilitación para conducir por el doble del tiempo que dure la condena. La misma pena se aplicará a quien organice o promocione la actividad y a quien posibilite su realización por un tercero mediante la entrega de un vehículo sabiendo que será utilizado para ese fin".
Además se aplicarán multas de 1.000 a 15.000 pesos a quien posibilite a otros correr picadas, como por ejemplo, los mecánicos que preparan los vehículos usados en carreras callejeras..
"Esta modificación permitirá dar un paso muy importante, ya que a partir de ahora quienes corran picadas estarán cometiendo un delito penal que como tal prevé una pena. En términos jurídicos es un avance sin dudas significativo", afirmó la senadora rionegrina María José Bongiorno (Frente para la Victoria).