VIEDMA (AV)- Los desbordes cloacales parecieran constituir una cuestión permanente en la ciudad.
El último caso se registró en el parque industrial cuando una máquina retroexcavadora realizaba tareas de reparaciones del caño troncal que conduce los líquidos hacia la zona de escurrimiento.
La laguna de unos 100 metros de extensión surgió a la vera de la Ruta Provincial 1, en las inmediaciones de una cámara de ventilación que posee la empresa Aguas Rionegrinas.
El nuevo desborde se registró en una zona donde está ubicado la ex textil Lahusen.
Los concejales Luis Nievas y Liliana Andaloro (Frente para la Victoria) dieron señales de preocupación en torno a la crisis sanitaria derivada de los problemas que tiene el sistema cloacal en la ciudad, planteando la necesidad de crear el Consejo Local de Municipio Saludable.
El principal fundamento está vinculado además con los casos puntuales que están sufriendo numerosos barrios de la ciudad que se ven afectados por el desborde permanente de líquidos.
Los ediles presionaron para crear el cuerpo con el propósito de que se elaboren situaciones de diagnóstico y tratamiento de la problemática a nivel comunitario.
En los primeros días de este mes, en medio de la polémica por la potabilidad del agua y la aparición de numerosos casos diarreicos, el Departamento Provincial de Aguas (DPA) inició los trabajos de reparación de la planta de tratamiento de líquidos cloacales desactivada en noviembre pasado.
Un grupo de operarios del ente regulador está concretando una serie de tareas destinadas a reforzar el talud de las piletas de contención, en procura de aislar las filtraciones que se estaban produciendo y que obligaron a su paralización.
El movimiento de tierras implican el acopio de unos 3.500 metros cúbicos de macadam. Asimismo, se instalarán nuevas membranas sobre el piso y las paredes de los piletones a fin de reforzar su impermeabilidad.
Por otra parte, los trabajos se complementarán con la revisión de los aireadores que actúan como depuradores de los desechos cloacales.
El DPA tiene previsto invertir más de 300.000 pesos en las reparaciones, y de acuerdo al cronograma previsto, la reactivación estaría prevista para los primeros días de junio.
Sin embargo, las tareas se encuentran paralizados desde la semana pasada en virtud de que el ente regulador necesitó enviar las maquinarias para concluir los trabajos de defensa costera en la ribera del río, a la altura del Centro Municipal de Cultura.
A los inconvenientes de funcionamiento de la planta se sumaron que su capacidad no tiene la suficiente receptividad con el crecimiento poblacional que experimentó la ciudad.
Por caso, a raíz de esta situación los vecinos autoconvocados por la sanidad de los ríos Limay, Neuquén y Negro, concretarán una asamblea durante jornada para analizar la situación derivada del escurrimiento de desechos al principal curso de agua que tiene la provincia.