RINCÓN DE LOS SAUCES (AN)- Una deuda de 2.000 pesos habría sido el móvil del asesinato del odontólogo Manuel Chirino, de 34 años, casado y padre de dos hijos. Al parecer el pintor José Nicanor Valdivia le venía reclamando el pago desde hacía tiempo, incluso a los gritos en lugares públicos, hasta que tomó la drástica decisión de matar al profesional.
La deuda surgió porque Chirino había construido un complejo de departamentos y contrató a Valdivia como pintor pero nunca le pagó los 2.000 pesos acordados por el trabajo.
El hombre sindicado como autor del crimen utilizó un poderoso revólver, calibre 357, para ejecutarlo de dos balazos. Con el mismo arma disparó a la policía antes de morir.
Las fuentes consultadas por "Río Negro" señalaron que a las pocas horas, Valdivia le dijo a un conocido: "me mandé una cagada". También le expresó su intención de quitarse la vida.
La policía llegó a tener un contacto telefónico con el pintor el jueves a la noche y trató de convencerlo de que se entregara, pero sin éxito.