Un coche bomba estalló ayer cerca de un cuartel de la guardia civil en Calahorra, en la comunidad autónoma de La Rioja (norte), causando un herido muy leve, tras un llamado telefónico en nombre de la organización separatista armada vasca ETA.
Un guardia civil resultó levemente herido en la explosión, que tuvo lugar hacia las 14H00 locales (13H00 GMT), indicó José Antonio Ulecia, delegado del gobierno central en esa región vinícola situada al sur del País Vasco.
La explosión tuvo lugar en momentos en que mucha gente se encontraba en las calles provenientes de una procesión de la Semana Santa. El cuartel y el barrio cercanos fueron evacuados tras el aviso de bomba.
Las fachadas de dos inmuebles resultaron seriamente dañadas y trozos del coche se proyectaron decenas de metros.
El alcalde de Calahorra, una ciudad de unos 20.000 habitantes, Javier Pagola, dijo a Radio Nacional de España (RNE) que "los daños materiales eran muy importantes", mientras que Ulecia se refirió a una explosión y a daños "considerables".
Existen fuertes sospechas de que ETA estaría detrás de este atentado. La asistencia de carretera del País Vasco (DYA) confirmó que a las 13H28 locales (12H28 GMT) recibió una llamada telefónica advirtiendo de que un coche bomba estallaría a las 14H00, reivindicando la acción en nombre de ETA.
La DYA es uno de los canales usados habitualmente por ETA para avisar de la colocación de un artefacto explosivo. El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, se trasladó a Calahorra, donde se sumó al millar de personas que en silencio condenaron el atentado.
"La guardia civil, al desalojar y acordonar enseguida la zona, ha evitado daños irreversibles", afirmó Camacho a la prensa. Unas 40 familias de la casa cuartel de la guardia civil y del barrio vecino, fueron realojados para pasar la noche.
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) del presidente del gobierno central en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, "condenó enérgicamente este nuevo atentado de ETA" y expresó su "solidaridad y gratitud hacia los miembros de las fuerzas de seguridad del Estado". El opositor Partido Popular (PP, derecha) también condenó el atentado.
ETA, responsable de la muerte de 822 personas en 40 años de lucha contra el Estado español por la independencia del País Vasco, es considerada una organización terrorista por la Unión Europea (UE). El último atentado atribuido a la organización armada vasca es el asesinato de un ex concejal socialista, Isaías Carrasco, en Mondragón, en el corazón del País Vasco (norte), el pasado 7 de marzo, dos días antes de las elecciones generales en España.
En febrero, ETA que había llamado a boicotear las elecciones (en las que se impuso por segunda vez el PSOE), hizo estallar tres bombas sin causar víctimas delante de un tribunal, una repetidora de televisión y una sede del Partido Socialista de Euskadi (PSE). ETA había anunciado el 22 de marzo del 2006 un "alto el fuego permanente" que permitió al gobierno socialista entablar un proceso de paz con ETA para alcanzar una salida pacífica. Pero estas negociaciones fracasaron.
ETA rompió su tregua el 30 de diciembre del 2006 al hacer estallar un coche bomba en el aeropuerto de Madrid, que causó la muerte de dos ecuatorianos. El gobierno socialista consideró "finalizado" el proceso de paz. ETA puso oficialmente fin a su tregua en junio del 2007.