NEUQUÉN (AN).- Un nuevo enfrentamiento entre bandas en el barrio San Lorenzo derivó en hechos de violencia.

Esta vez no hubo heridos graves ni muertos, pero luego de intervenir en una incipiente trifulca, la policía fue perseguida a piedrazos hasta el destacamento. Allí, el pequeño grupo de alrededor diez personas entre las dos bandas, se transformó en un grupo más numeroso de más de 30 integrantes que arremetió contra la seccional.

El hecho se produjo, según informó el subcomisario Claudio Roggero de la unidad policial 16, después de las 23, y comenzó en el espacio cultural organizado por la municipalidad, ubicado sobre calle Godoy.

Hubo ocho detenidos, entre ellos un menor, que ya recuperaron la libertad.

Los siete mayores presentaban un "cuadro etílico agudo", según confirmó el diagnóstico policial.

La hipótesis principal de la policía, si bien se abrió una causa en el juzgado de instrucción Nº5, es que la alta ingesta de alcohol fue la que motivó el enfrentamiento entre las bandas, que luego se unieron contra los uniformados.

Roggero explicó que la pelea entre dos grupos antagónicos del barrio comenzó sobre el cierre del espectáculo, al que había concurrido el intendente Martín Farizano y un grupo de funcionarios municipales, dado que esa noche cerraba el ciclo cultural.

Era la primera vez que "Neuquén Cultural" se trasladaba al oeste de la ciudad y, si bien el responsable de la comisaría 16 explicó que en ninguno

de los fines de semana anteriores se habían producido incidentes, el domingo todo terminó en una lluvia de piedras contra el destacamento San Lorenzo.

Cuando se detectó el enfrentamiento entre dos bandas, que en total rondaban las diez personas, se apostó a un grupo de uniformados en el espacio.

"Intervino el personal y los separó", explicó Roggero, pero fue en ese momento cuando, desde las dos bandas, "empezaron a arrojar algunas piedras", relató el subcomisario.

"Fue peor"

"Para evitar este incidente, se dispuso que el personal se desplegara una cuadra. Pero fue peor, porque empezaron a llover las piedras y, para evitar el enfrentamiento, se dispuso que el personal bajara al destacamento San Lorenzo", agregó.

El destacamento, que al igual que la comisaría 16 es blanco habitual de las bandas que operan en el barrio, está ubicado a dos cuadras del evento, sobre calles Pastor Pluis y Colibrí.

"Cuando el personal llegó al lugar, afuera se agruparon unas 30 personas y comenzaron a apedrear el destacamento", indicó Roggero.

El saldo fue dos policías con heridas leves y un móvil policial y dos vehículos particulares con daños.

"Consideramos que son diferencias que existen acá entre los chicos. Pero no se citaron en el lugar", dijo Roggero respecto de la posibilidad de que se tratara de un ajuste de cuentas.

El sábado, un menor de edad fue asesinado a balazos en el barrio, y el domingo, un joven de 22 años se entregó y dijo que lo amenazaron. Pero el titular de la 16 descartó que los hechos estuvieran conectados. Sin embargo, otra versiones indican lo contrario.