Domingo 16 de Marzo de 2008 > Internacionales
Ya son 90 los muertos en el Tíbet
A las 80 víctimas del viernes en la capital se suman otras 10 de hoy luego de una represión contra monjes y manifestantes que protestaba contra el dominio chino en la provincia de Sichuan. El Dalai Lama habla de "genocidio cultural" y pide ayuda internacional.

El estallido de violencia en Tíbet contra el dominio chino se ha cobrado hasta ahora las vidas de unas 90 personas, según datos del gobierno tibetano en el exilio, mientras China ha reforzado el despliegue de tropas en el altiplano.

Tras los 80 muertos registrados el viernes en la capital tibetana, Lhasa -diez, según las autoridades chinas-, las fuerzas de seguridad dispararon hoy contra monjes y manifestantes pacíficos en Aba, en la provincia de Sichuan, causando la muerte a siete de ellos. También en la capital tibetana se produjeron hoy nuevos enfrentamientos contra la policía china, que según testigos patrulla con tanques por la ciudad.

Los agentes emprendieron hoy redadas contra los tibetanos por las calles de Lhasa, donde pese al toque de queda se llevó a cabo una manifestación contra el dominio chino, informó un empleado de una agencia de viajes en Pekín. En las provincias de Sichuan y Gansu, centro del budismo tibetano, varios comercios y vehículos fueron incendiados. La policía reaccionó utilizando gas lacrimógeno y según solicitantes de asilo se realizaron también disparos al aire.

El Dalai Lama calificó la situación de "genocidio cultural" y recordó a la comunidad internacional su "responsabilidad moral" de advertir a China sobre la situación de los derechos humanos y pidió una investigación exhaustiva sobre las causas de la violencia, expresando su temor de que se produzca un mayor derramamiento de sangre.

Aunque defendió la celebración de los Juegos Olímpicos y reiteró que ni él ni el gobierno tibetano en el exilio aspiran a la separación de China o la proclamación de un Estado independiente, manifestó su deseo de que Pekín garantice a Tíbet una cierta autonomía y el cumplimiento de los derechos humanos.

Mientras, las autoridades chinas instaron a las organizaciones no gubernamentales extranjeras a abandonar el altiplano tibetano. "Todos los empleados de ONG hemos sido advertidos de abandonar Lhasa antes del lunes", dijo uno de ellos en declaraciones que publicará el diario alemán "Frankfurter Rundschau" en su edición del lunes.

El lunes a medianoche finaliza el plazo impuesto por las autoridades chinas para que los alborotadores se entreguen si quieren ser tratados con indulgencia. Se teme que después de este plazo y de la salida de los extranjeros la policía china arremeta con dureza contra los tibetanos. "Las fuerzas de seguridad se cebarán", dijo el empleado de la ONG.

Fuente: DPA

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí