Sábado 15 de Marzo de 2008 Edicion impresa pag. 44 > Cultura y Espectaculos
El Biombo, veinte años de títeres y teatro
La compañía artística, de Roca, festeja sus dos décadas -hoy a las 22- con una serie de actividades artísticas.

ROCA (AR).- Ricardo Di Giovanni y Lina Destéfanis son el alma de la Compañía de Teatro y Títeres El Biombo, un grupo que comenzó su camino hace ya veinte años. A su trabajo artístico y pedagógico también sumaron hace más de un año el Club de Arte El Biombo, un espacio en el que comparten su experiencia y que abren también a otros creadores. Cumplir dos décadas dedicadas al arte son una buena oportunidad para festejar y lo harán hoy con una velada muy especial (ver recuadro).

Con mucha calidez, un poco de nostalgia, pero bien plantados en el presente y con muchos proyectos a futuro, Lina y Ricardo hicieron un balance en que vida y trabajo compartido van juntos.

Todo comenzó en el verano de 1988, cuando Lina y Silvia Gentile -actrices y titiriteras de Purogrupo- crearon El Biombo y desde Viedma iniciaron una gira por los hospitales de la Zona Atlántica. Luego se les sumó Ricardo, actor y director que había llegado a Viedma desde El Bolsón y la agrupación pasó a llamarse Compañía de Teatro y Títeres El Biombo.

"De estos 20 años de El Biombo estuvimos diez en Viedma trabajando fundamentalmente en la Zona Atlántica y los parajes de la Línea Sur y nos dedicábamos a hacer muchos espectáculos didácticos", recuerda Lina.

En 1997 Funbapa los contrata para realizar espectáculo en el marco de la campaña de Control y Erradicación de la Mosca de los Frutos. "Hicimos diez funciones en la Rural de Viedma y nos propusieron venir a Guerrico para acompañar lo que era la implementación del programa", cuenta Ricardo. Estas funciones fueron todo un éxito y se les planteó la posibilidad de trasladarse al Alto Valle, y aunque estaban bien en Viedma decidieron que "no hay que irse cuando uno está mal, hay que producir un cambio cuando uno realmente esta bien".

"Además fue muy tentador. Nosotros teníamos una asignatura pendiente: poder concretar el profesorado de Arte Dramático, teníamos mucho laburo, pero no teníamos el título en la especialidad", señala Lina.

Así fue como decidieron quedarse en Roca "por el Instituto Nacional Superior de Arte (INSA, actual IUPA). Teníamos trabajo con la Funbapa, un contrato por tres años, y la carrera dura cuatro. Allí empezamos nuestro trabajo en Roca y realmente fueron años gloriosos profesionalmente", agrega Ricardo.

Como grupo, desde sus comienzos se han enfocado tanto en lo artístico como en

lo didáctico. "Dentro de lo artístico hay mucha gente que opina que lo didáctico no es válido como artístico o que son artistas de espectáculos de determinada categoría. Nosotros estamos muy imbuidos de lo que es la filosofía de Educación por el Arte. Esto que Norman Tornini implementó en la provincia y que todavía sobrevive en muchas personas que hemos trabajado en esa situación", asegura Ricardo. Y Lina complementa su idea: "Es estar en un estado de mucha apertura, mucha creatividad, pero al mismo tiempo en mucho contacto con la gente. El inicio de la década del '80, la apertura democrática, trajo este proyecto de Educación por el Arte y también todo lo que es animación sociocultural. Es como que dejamos de ser el artista allá en su torre de marfil y entramos en contacto con la gente. Eso es algo que nos define".

"Al mismo tiempo que hacemos espectáculos didácticos no perdemos de vista otro tipo de espectáculos. Los cuatro años que estuvimos estudiando, entre Funbapa, el INSA, los dos chicos, no teníamos mucho tiempo para hacer otro tipo de propuestas artísticas pero una vez que nos recibimos ya nos liberamos bastante y allí empezamos un poco a probar con otros rubros".

Esa experiencia los lleva a generar en Roca propuestas de distinto tipo y en diferentes funciones, ya sea como escritores, actores, directores o productores compartiendo proyectos con distintos artistas, porque como explica Lina están siempre "integrando distintos lenguajes artísticos. Quien va a ver un espectáculo nuestro y va a ver algo de danza o alguna canción o la parte plástica. Experimentamos junto con otros profesionales distintos lenguajes y lo volcamos todo en el espectáculo y en los talleres que damos también, porque está la parte pedagógica que tratamos de no descuidarla, porque nos parece clave que haya un semillero. En cada lugar donde estuvimos quedaron grupos conformados".

Cada uno de ellos con "una identidad muy personal porque cada grupo tiene su propia identidad" -agrega Ricardo-.

El presente los tiene trabajando de lleno en el Club de Arte El Biombo, pero Lina también está preparando la puesta de un espectáculo clásico de títeres con "El propietario" de Roberto Espina y "El espantatodo" de Kique Sanchez Vera. A Ricardo una lesión lo alejó por un tiempo del escenario pero todo su fervor creativo lo vuelca en aprender a gerenciar la sala y apoyar a otros grupos. También están reviendo conformar un elenco nuevo para recuperar un espectáculo.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí