"El triunfo fue muy importante, pero para avanzar a los octavos (de la Copa Libertadores) debemos seguir creciendo y ganando".

Las palabras de Diego Simeone encierran la satisfacción por haber logrado la primera victoria del año fuera de casa, y nada menos que por la Copa. Pero el conformismo del 'Cholo' por el éxito ante Universidad Católica va más allá. River está logrando de a poco Lograron mayor solidez y están asimilando de buena manera los dos sistemas tácticos que tiene definidos el entrenador, además de la rotación que está llevando adelante.

El entrenador asumió en River imaginando un 3-3-1-3, pero el esquema quedó descartado luego de perder con Boca en Mar del Plata. Luego apostó a un 4-3-3-1 y priorizó las características de los jugadores, manteniendo siempre la vocación ofensiva. Otra conclusión que sacó Simeone: ser más cautelosos en condición de visitante con un 4-3-1-2. Así se jugó en la importante victoria del miércoles ante la Católica, que colocó a River más cerca de la clasificación a la próxima ronda.

Ahora el 'millo' tiene puesta su atención en el frente interno. Ayer Simeone anticipó que podría realizar cambios para dosificar las cargas físicas de sus dirigidos, en el clásico del domingo ante Racing. Si bien el técnico evitó dar precisiones, se sabe que no podrá contar con Gustavo Cabral, quien fue expulsado ante Estudiantes, y sería reemplazado por Cristian Nasuti o Danilo Gerlo.