María Eugenia Barragán Sampallo reclamó hoy a la Justicia que condene a 25 años de prisión al matrimonio que la crió como propia y al militar que se la habría entregado a esos esposos cuando tenía sólo dos meses de vida.
Desde la querella, la joven, hoy de 31 años, le pidió al Tribunal Oral Federal 5 que castigue con esa pena al ex capitán del Ejército Enrique José Berthier, que habría prestado servicio en el centro clandestino de detención El Vesubio, y al disuelto matrimonio de Osvaldo Arturo Rivas y María Cristina Gómez Pinto, quienes anotaron a la niña como si fuera su hija de sangre.
A todos ellos la querella los consideró responsables de "ocultación y retención" de la menor, "alteración de la identidad" y "falsificación de tres documentos públicos".
María Eugenia prefirió no hablar de sus sentimientos tras la audiencia: "Son situaciones fuertes, difíciles para mí, para todos; mi sensación es algo privado". No obstante, la joven resaltó que esto "es un paso más dentro de todo lo que durante todos estos años estuve buscando".
Mañana será el turno del fiscal Félix Crous, que impulsa la acusación; luego hablarán las defensas y el 4 de abril el TOF dará su veredicto.
Mirta Mabel Barragán -con un embarazo de seis meses- y Leonardo Rubén Sampallo fueron secuestrados en diciembre de 1977 en el departamento de Once donde se habían refugiado porque se sabían perseguidos.
Nacida a fines de enero o principios de febrero, la beba fue anotada con una partida falsificada como María Eugenia Violeta Rivas y recién a los 7 años supo que era adoptada. En 1989 una denuncia anónima alertó a los organismos de derechos humanos que la niña habría sido apropiada.
Fuente: DyN.