Hace bastante tiempo del problema de los bomberos de Roca. Luego de varios meses, Personas Jurídicas de Viedma había dado fecha para la asamblea (20-02-08), pero siempre aparece algo nuevo para anular la asamblea. En este caso, unos "socios" aducen de que fueron dados de baja por mora en el pago de la cuota. Es cierto que se les dio de baja, pero antes se publicó en el "Río Negro" que todo socio que estuviera en mora se acercara a regularizar su situación. No lo hizo nadie o, mejor dicho, de los 70 sólo se acercó uno, pagó sus cuotas y hoy sigue siendo socio. ¿Y los demás qué? Sólo tienen allegados al poder para que el cuartel de Bomberos de Roca siga en decadencia con unidades en estado deplorable y con escasos recursos para seguir funcionando. ¿O tal vez quieren seguir tratando de ocultar las irregularidades que cometió la presidencia del señor Julio Cofré? Porque hasta hoy nunca rindió en qué se gastaron los subsidios que el intendente Carlos Soria donó en nombre de la ciudad, fueron $ 80.000 que entraron a las cuentas que Bomberos tenía en el Banco Nación. Al cuartel no llegaron los fondos, pero sí fueron retirados en sumas importantes casi diariamente.

Cuando yo pedí informes jamás me contestaron una nota y es ahí donde comienzo a manifestarme en los medios de comunicación y armando una carpa frente al cuartel y otra frente al municipio, pero hasta hoy, nada.

El intendente Carlos Soria envió una carta documento a la anterior comisión solicitando que se dé a conocer en qué se gastó el dinero y, como siempre, nada.

Lo peor es que como bombero nunca tuve el apoyo del jefe de la institución, Feliciano Fernández, ni del segundo jefe, Juan Mercado. A ellos les correspondía pedir lo que yo solicitaba, por suerte Mercado se jubiló pero sigue apoyando a la anterior gestión, ¿por qué? Es una pregunta que nos hacemos varios. Lo llamativo es que jamás se acercó un fiscal de oficio para saber de qué se trataba todo el problema, hicieron oídos sordos fiscales, políticos... Pero les debería interesar ya que somos bomberos voluntarios de su ciudad y somos totalmente apolíticos, sólo nos dedicamos a servir a quien nos necesita.

Hoy nos vemos manchados, porque personas ajenas a la institución -y que nunca fueron bomberos-nos están perjudicando en lo económico y en lo operativo, debido a que por eso no recibimos los subsidios que desde Nación nos envían. Solicitamos ayuda, no económica sino ayuda de ciudad.

Adrián Andrade, DNI 14.598.581

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Roca

En este día tan especial para todas nosotras, quiero repetir algo tan usual como verdadero, que no sólo el 8 de marzo es el "Día Internacional de la Mujer", ni el 25 de noviembre el "Día Internacional de la no Violencia Contra la Mujer", sino que todo los días son el "Día Internacional de la Mujer" y el "Día internacional de la no Violencia Contra la Mujer".

Mezclamos mucho en estas fechas, el día de la Mujer con la situación de la mujer como víctima de la violencia familiar, laboral, social, económica y muchas otras cosas, porque no sólo tenemos problemas en el seno familiar, sino cuando por nuestra condición de mujer se nos dan pocas oportunidades de trabajo -aunque contemos con los mismos o mayores conocimientos- y cuando lo tenemos está mal pago.Nosotras, las mujeres, atendemos diariamente varios frentes: la pareja, los hijos, la casa, el trabajo, el estudio, etc., y socialmente es poca la colaboración que tenemos.

Hoy en día es un tema complejo que se canaliza a través de demandas al Estado y a la política como tal, para obtener mayores oportunidades de capacitación, de educación, infraestructura de apoyo a la familia, jardines maternales, de infantes y fundamentalmente iguales condiciones en el acceso y al pago del trabajo.

A lo largo de los siglos siempre la mujer ha ocupado un lugar preponderante en la historia, pero las cosas antes eran muy distintas, muchas lucharon para generar un cambio, como luchó Evita, preocupada por las cuestiones de la mujer, lo más trascendente fue la incorporación de la mujer en la vida política, estableciéndose en 1947, mediante la ley 13.010, el derecho al voto y a ser candidatas por las mujeres, en 1952 contábamos con 23 diputadas y 6 senadoras sentadas en el parlamento, hasta llegar hoy a la presidencia de la nación.

Resumiendo, todo cabe en una mujer: la familia, el trabajo, el estudio, los hijos, padres y abuelos, una mujer estresada por los muchos deberes fuera y dentro del hogar, por eso hoy es un día muy importante, es día de lucha a favor de un sinnúmero de mujeres del mundo y miles de mujeres argentinas que esperan su justa reivindicación social y política. Con este compromiso peronista quiero cerrar estas palabras, abogando por la libertad de Ingrid Betancourt. ¡Feliz día de la mujer!

María Graciela Astuti, DNI 13.477.422 - Viedma

Días atrás, la paciente Fany Barrera publicó un agradecimiento en este diario con el siguiente texto: "Agradezco la atención recibida en la guardia del hospital Cipolletti el día 28/02/08 y a las personas que me asistieron en la calle con motivo de ser víctima de un brutal asalto". Fany Barrera.

La presente pretende reflexionar sobre las consecuencias de la difusión indiscriminada de actos médicos.

La hermana de la paciente, que publica ese agradecimiento, efectuó declaraciones a un medio radial de la ciudad denunciando mala atención y mal trato por parte del personal. Tras ello solicité al staff de guardia externa un informe urgente sobre la atención de la paciente, el que es coincidente con la manifestación pública adjunta en lo referente a la excelente atención recibida e indiqué a mi secretaria se pusiera en contacto con ese medio para expresar mi disposición como director a cargo a contestar esas declaraciones, no habiéndome otorgado el derecho a réplica.

Nadie como nosotros sabe de las múltiples deficiencias del sistema, las que todos los días pugnamos por erradicar. Pero nunca debemos olvidar que el hospital público es un bien de la sociedad y para optimizar su funcionamiento es primordial la valoración del esfuerzo anónimo de muchas personas que cumplen diferentes funciones, por lo cual es fundamental que la población se acerque a su hospital a brindar sus críticas, sugerencias y felicitaciones, las que constituyen un estímulo para el duro trabajo diario.

Somos conscientes del desprestigio de las instituciones y que la manifestación pública es la expresión de esa falencia, pero atacar al hospital a través de los medios sin existir sanción judicial daña al sistema pues hace decaer el espíritu de servicio del personal, requisito fundamental para un adecuado funcionamiento de la institución. Para que se desarrolle el acto médico es fundamental un vínculo de confianza mutua, pues no se puede atender y defenderse al mismo tiempo. Si la población ataca al hospital del cual depende para su atención, se daña a sí misma. Por lo expuesto, en defensa de la adecuada atención de la población, apelamos a que la libertad de expresión se equilibre con la responsabilidad por las consecuencias de las denuncias efectuadas.

Lejos estamos de hacer una defensa corporativa, ni de no comprender el dolor humano con el cual convivimos, por el contrario, buscamos establecer un diálogo constructivo entre las autoridades del hospital y sus usuarios para mejorar día a día nuestro servicio.

Invitamos a los responsables de los ámbitos judiciales, de los medios de comunicación y a la población en general a debatir las ideas vertidas en esta carta, pues consideramos que se trata de un tema que excede el ámbito del hospital público, pues se vincula con la forma de canalizar los conflictos de la sociedad.

Dr. Carlos Baruf, DNI 10.261.410

director a cargo Hospital Pedro Moguillansky de Cipolletti

¿Por qué digo indios?, digo esto porque hay mucha gente que cree que andamos en la Patagonia con las plumas y no saben que aquí habitan: italianos, franceses, alemanes, españoles, árabes, norteamericanos, japoneses, suizos, rusos, ingleses y muchos más; y algún vasco como el suscripto que si no son franceses son españoles.

Queremos el tren Plaza Constitución-Zapala y Plaza Constitución-Bariloche. No pedimos el tren bala, cuyo costo es una barbaridad en millones de dólares, porque habrían descarrilamientos debido al mal estado de las vías y rieles. Yo no digo volver a épocas pasadas con 36.000 kilómetros de vías, de las cuales hoy hay solamente 7.000. Pero con lo que cuentan los trenes balas se pueden acondicionar las vías, comprar vagones o armarlos, comprar locomotoras. Antes habían casi 40 talleres de reparaciones, en donde se fabricaban vagones, se reparaban locomotoras; hoy no quedó ni el 15% de esos talleres, vaciaron todo. Las locomotoras a vapor que estaban reparadas las cortaron y las fundieron, pudiendo haberlas vendido a otros países que trabajaban con éstas. Así quedó el lamento de la gente por las locomotoras que fueron orgullo de ciudades como Ingeniero Jacobacci, con la 500 y 501, las más poderosas de dos cilindros de Sudamérica; en Neuquén las 1500-32-41-43, entre otras. En los talleres habían maquinarias y herramientas, ¿adónde fue todo eso?

Se le quitó a la gente un medio de movilidad cómodo y económico, con el cual se evitarían muchos accidentes de tránsito. Las cargas pesadas rompen las rutas, mientras que un tren arrastra la carga de muchos camiones y con las vías reparadas duraría muchísimos años. Un transporte como el tren marchaba con lluvia, nieve, a diferencia de los micros. Sin los trenes, infinidad de pueblos quedaron aislados, sin rutas. Es más, el cierre de los ferrocarriles provocó que miles de personas emigraran a las grandes ciudades, conllevando así al problema de viviendas. Por lo tanto, considero que un buen sistema de ferrocarril cambiaría la situación del país, con una buena administración dirigida por un ingeniero ferroviario que entienda de hierros, que cuando compren locomotoras se cercioren de que haya repuestos para las mismas. Para evitar que suceda lo mismo que cuando compraron la enorme cantidad de locomotoras diésel y cuando hubo que hacer las reparaciones pertinentes se les dijo que no se fabricaban más y había cementerios de locomotoras por todos lados.

Me atrevo a decirles que con vías en condiciones un tren de pasajeros desde Neuquén a Plaza Constitución no tardaría más de 14 horas de viaje. Las locomotoras diésel viajan a 140 km por hora y a esa velocidad se activa un dispositivo, hombre muerto, frena el tren y se para el diésel. Sin embargo, a 120 ó 130 km por hora se pueden hacer los 1.200 km en 14 horas, parando 1 minuto por estación habilitada.

Me gustaría excelentísima señora presidenta de los argentinos que leyera esta carta mal trazada de este humilde ex maquinista o conductor ferroviario, que no alcanza a entender por qué en otros países los trenes corren a 350 km por hora y aquí no tenemos trenes porque a un individuo se le ocurrió cerrar los ferrocarriles. Dejando así a 100.000 familias del ferrocarril sin trabajo, de las cuales en este momento sólo viven 12.000.

Por último, sugiero una propuesta de comunicarse con la comisión directiva de La Fraternidad y jubilados, en donde hay instructores, gente de mucha experiencia que puede asesorar junto con miembros de la Unión Ferroviaria. Todos ellos, cincuenta personas, que quieren al ferrocarril y por supuesto a nuestra patria.

Excelentísima señora presidenta de la Nación, abriendo talleres y habilitando estaciones se abriría una importante fuente de trabajo. Sin otro particular, se despide atentamente un humilde ex maquinista jubilado.

Armando Errrecart, LE 7.382.210 - Neuquén