BUENOS AIRES (DyN) - La fiscal de Dolores Fernanda Jachman pidió hoy que el conductor del micro atropellado por un tren sea imputado de un delito que contempla una pena de prisión de entre 8 y 25 años, mientras su acompañante se aprestaba esta tarde a recuperar la libertad.

En tanto, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner atribuyó la tragedia ocurrida en el paso a nivel ubicado en el kilómetro uno de la ruta 63, que causó 17 muertos y más de 60 heridos, a "un acto de irresponsabilidad".

El fiscal general de Dolores, Luis Defelitto, reveló en los tribunales de esa ciudad bonaerense que Jachman reclamó que la prisión de los dos conductores "se convierta en detención". Para Javier Rodríguez, quien guiaba el micro al momento del desastre, Jachman solicitó los cargos de "homicidio doloso, con dolo eventual, en concurso ideal con lesiones graves dolosas".

En tanto, para Luis Garófalo, su compañero, pidió la imputación por "homicidio culposo por omisión, agravado por la cantidad de muertes en concurso ideal, con lesiones culposas", que prevé entre 2 y 5 años de cárcel. Según trascendió, Garófalo quedaría en libertad, aunque hasta las primeras horas de esta tarde no se lo vio salir de los tribunales de Dolores.

Oscar Salas, uno de los abogados de los choferes, confirmó que Rodríguez estaba al mando de la unidad de El Rápido Argentino y que Garófalo iba "durmiendo". Ambos fueron trasladados esta mañana a los tribunales para que se les tome declaración indagatoria por la tragedia, que entre los fallecidos figura un matrimonio con sus cuatro niños y otros tres menores de edad.

Según contó el letrado, Salas se encuentra "en estado de shock absoluto y con una tristeza que le impedía pensar", ya que "él tiene conocimiento de todo y está destruido". Sobre la responsabilidad civil de la empresa propietaria del micro expresó que tendrá que hacerse cargo del "resarcimiento patrimonial de todas las víctimas". "La impresión que tuve realmente me conmovió, por el estado en que estaba el muchacho, estamos hablando de un trabajador que pudo o no haber cometido" un delito, manifestó el abogado.

En cuanto al maquinista de la formación de Ferrobaires, Defelitto indicó que "la fiscal hasta ahora no ha visto nada raro" en su actuación, y aseguró que los testimonios recabados "en principio permiten sostener que la barrera estaría baja" al momento del brutal choque.

A todo esto, en un acto en la localidad entrerriana de Larroque, la presidenta Fernández de Kirchner hizo una convocatoria "a la responsabilidad y al respeto por la vida del otro", al referirse a la tragedia de ayer que, dijo, "enlutó a todos los argentinos". "¿Qué fue lo que falló?.

Teniendo todos los instrumentos, teniendo todo para hacerlo bien, ¿por qué salió mal?", indagó, tras remarcar que el rodado embestido "era un colectivo nuevo, impecable, de reconocida marca, modelo 2007. El paso a nivel tenía todos los niveles de la modernidad: barrera automática, señalamiento sonoro y lumínico". "Ayer fue un día triste para los argentinos. Ayer vimos que vidas humanas se perdían, precisamente, por un acto de irresponsabilidad", dijo la Presidenta, intercalando el tema en su discurso, dedicado a la educación.

En tanto, el ministro de Salud bonaerense, Claudio Zin, destacó hoy la labor "inmejorable" de los médicos del Hospital San Roque de Dolores para afrontar la emergencia. El funcionario, quien ayer concurrió al lugar del desastre junto al gobernador Daniel Scioli, se manifestó "apenado, porque lo de ayer, que por supuesto pudo evitarse, no se evitó y murió muchísima gente". "Una cosa es contarlo y otra es vivirlo. Fue muy duro. Ojalá no ocurra nunca más", deseó.