Insólitamente, los ex ministros de Economía de Néstor Kirchner, Felisa Miceli y Roberto Lavagna, lanzaron fuertes críticas al manejo que el gobierno hace de la política económica para contener la inflación y la forma en que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) realiza la medición del Índice de Precios al Consumidor (IPC) -que depende del secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno-.

Miceli consideró que a pesar de la baja inflación que difunde el gobierno, "no hay nada para festejar", porque remarcó que "lamentablemente la población ve desde su bolsillo cómo va perdiendo, desapareciendo el poder adquisitivo".

"Hay que combatirla"

Indicó a radio Rivadavia que "los productos de primera necesidad aumentan cotidianamente", por lo cual evaluó que "hay que profundizar cada vez más el trabajo para lograr que sin frenar la economía, sin provocar aumento de la tasa de interés, combatir este flagelo que es la inflación".

Por su parte, Lavagna sos

tuvo que hay que "recuperar el INDEC reincorporando al personal técnico que ha sido separado y atenerse a las metodologías internacionales en materia de cálculos".

Además, remarcó que le hubiese "gustado que se produjeran cambios en el INDEC, que por ahora no se produjeron".

Sin embargo, cuando fue consultado sobre la gestión de Lousteau, contestó que "nunca juzga a las personas, sino que analiza los resultados y cuando los resultados estén lo veremos".

En tanto, Miceli estimó que hacen falta "acuerdos con toda la cadena de valor que está detrás del precio el producto, como los insumos, que no aumenten los costos".

"Esto es lo que falta, no se hace, y se tiene que profundizar", afirmó la ex ministra, quien sostuvo que "se tienen que bajar los precios de lo que compran quienes fabrican productos para el consumidor".

A su criterio, en la actual gestión "no se ataca a toda la cadena de valor", y consideró que "se han dejado de hacer cosas que eran importantes".

"En el 2006 se contuvo la inflación, se trabajó con las empresas muy fuertemente. Lamentablemente a partir del 2007, las cosas se complicaron", señaló Miceli.

De todos modos, opinó que al ministro de Economía, Martín Lousteau, "hay que

darle tiempo", pero subrayó que es preciso "recrear cierta creatividad y actitud de gestión resolver".

"Falta presencia para cuestiones centrales", sostuvo la ex titular del Palacio de Hacienda, quien el 16 de julio del 2007 debió dejar su cargo, un mes y medio después que se hallaran 100.000 pesos y 31.000 dólares dentro de una bolsa oculta en el baño de su despacho.

La ministra había sucedido a Lavagna, a quien Kirchner le pidió la renuncia tras haber permanecido en el Palacio de Hacienda desde mediados del 2002, con el gobierno de Eduardo Duhalde y luego con el ex gobernador patagónico. (DyN)