El congreso nacional del PJ dio ayer el puntapié inicial para avanzar en el camino que terminará con casi cuatro años de intervención y pondrá al ex presidente Néstor Kirchner en la cúspide del partido.
Los congresales justicialistas resolvieron convocar a elecciones internas para elegir a sus autoridades el 18 de mayo próximo y aprobó una reforma de la carta orgánica que reduce a 75 los miembros del consejo nacional partidario.
Ambas resoluciones fueron aprobadas por unanimidad por parte de los 803 congresales presentes en Parque Norte.
Como era de esperar, se dio por descontado que Kirchner será el próximo jefe partidario. "Es la opinión generalizada", dijo Antonio Cafiero, quien presidió el encuentro.
Sin más rivales a la vista que los hermanos Rodríguez Saá, la elección de Kirchner como nuevo jefe del partido quedó un paso más cerca de convertirse en un trámite.
La reforma de la carta orgánica establece, además, que el consejo nacional estará integrado por un presidente, cinco vicepresidentes y una mesa chica de 28 miembros; también se aprobó una amnistía para dirigentes que se fueron del partido.
Las deliberaciones comenzaron alrededor de las 12.45, con la llegada del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, congresal por la Capital. Los primeros participantes arribaron al predio poco después de las 11. Entre ellos, Antonio Cafiero.
Fiel a su estilo entre coloquial e irónico, el histórico dirigente aprovechó los micrófonos que lo esperaban en Parque Norte para embestir contra las figuras del partido que no dieron el presente, entre ellos el Eduardo Duhalde, su esposa Hilda "Chiche" González, Carlos Menem y los hermanos Rodríguez Saá.
"Hacen muy mal en faltar. Tendrían que venir a debatir como lo hacíamos nosotros cuando estábamos en minoría", azuzó.
También se ocupó de dejar claro que la reorganización del PJ implicaba una "amnistía" para quienes en los últimos años hicieron política por fuera del partido. El grupo incluye al propio Kirchner, que se convirtió en presidente como candidato del Frente para la Victoria, y a todos los dirigentes que se alinearon con su gobierno.
"Claro que vamos a aprobar una amnistía. Muchos van a poder dar el paso del regreso. El partido tiene abiertas sus puertas a cualquiera que quiera profesar el credo justicialista", dijo Cafiero. (DyN y Télam)