ZAPALA (AZ).- La Cámara de Juicio en lo Criminal de esta ciudad condenó ayer a 10 años y 8 meses de prisión a Miguel Ángel Aguirre por el delito de homicidio simple agravado por el empleo de arma de fuego.
Aguirre, de 20 años, fue hallado culpable de asesinar en Junín de los Andes a Héctor Eloy Romero el 11 de noviembre de 2006, de dos disparos luego que ambos protagonizaran una breve discusión.
El fiscal Héctor Trova había reclamado una pena de 15 años de cárcel para Aguirre, mientras que los defensores González Novillo y Mariano Laprida solicitaron que se aplique el recurso de legítima defensa.
Aguirre había relatado que la noche del hecho salió del video juego "Carol" y se vio rodeado por varias personas entre las que se encontraba Romero.
Dijo que intentó correr pero los sujetos, armados con cuchillos, lo alcanzaron nuevamente frente a la panadería "El Sol". También expresó que dos muchachos que no conocía le dieron un arma de fuego y que cuando la tomó "se le escaparon dos o tres tiros".
"Lo solicitado por los asistentes técnicos del imputado adolece de un problema que, en mi opinión, es insalvable; esto es que el propio encartado dijo que el arma se la dieron dos desconocidos y que los disparos se le escaparon, es decir que los disparos no los realizó urgido por la necesidad de defenderse sino porque se le escaparon", sostuvo el camarista Oscar Rodeiro.
Los relatos que aportaron varios testigos del hecho terminaron por derribar la coartada de Aguirre quien había explicado que Romero portaba un cuchillo.
"Este dato es muy relevante porque si la víctima y sus acompañantes estaban desarmados, nada permite sostener que existió una agresión concreta en marcha", agregó Rodeiro.
El magistrado calificó de "mendaz" el testimonio que aportó Aguirre cuando sostuvo que "dos desconocidos le acercaron un arma".
"Inverosimilitud que se evidencia aún más si no perdemos de vista que el imputado reconoció que tenía problemas con la víctima y sus amigos, lo que permite admitir como posible que esa noche ante la eventualidad de algún enfrentamiento, haya salido portando el arma que en definitiva utilizó", afirmó el magistrado.
También agregó que Aguirre "intentó engañarnos al pretender que el arma utilizada era una pistola". En ese sentido, el juez indicó que "es francamente increíble que se le escape más de un disparo con un revólver, no es necesario ser un experto en el manejo de armas para afirmar ello".
Ampliando el concepto, Rodeiro enfatizó que "si se tratara de una pistola automática