Viernes 07 de Marzo de 2008 Edicion impresa pag. 38 > Policiales y Judiciales
Familiares exigen el "máximo castigo" por el crimen de Durán Soto

NEUQUÉN (AN).- "Estamos alerta, la sociedad está observando a la justicia y nosotros estamos reclamando que haya justicia. Desconfiamos de esta Cámara cuyos jueces han dejado libre a un comisario que violó a una niña que quedó embarazada como si fuera el 'espíritu santo'".

Patricio Durán, el hermano de Richard Durán Soto -apuñalado hace un año en una esquina céntrica de esta ciudad- reclamó ayer "el máximo castigo" para los dos sujetos implicados en el asesinato.

El juicio, que se extenderá durante tres días y comenzará el lunes 17 de este mes, será en la Cámara de Apelaciones que integran los jueces Emilio Castro, Héctor Dedominichi y José Andrada.

Richard Durán Soto tenía 22 años y fue asesinado el 21 de enero del año pasado a las 7 de la mañana, en la esquina de Rivadavia y Buenos Aires. Allí mantuvo una discusión con un joven que pasaba por el lugar, quien luego de ser golpeado por la víctima regresó y lo apuñaló con un cuchillo de guerra. Durán Soto discutía con su novia, llamada Azul, cuando dos sujetos que iban en una moto se detuvieron a presenciar la escena e intervinieron en la discusión. Richard golpeó a uno de ellos. Cuando volvieron tenían consigo un cuchillo de guerra con el que lo asesinaron delante de su novia quien también recibió graves heridas. Los sujetos subieron a la moto y se fueron. Uno de los acusados es Jorge Martín Altamirano, a quien le imputaron el delito de autor material de homicidio simple y lesiones graves. El otro es Rafael Pichún, quien sería el conductor de la moto y quien le dio el cuchillo "tipo Rambo" a Altamirano.

Pichún, un joven de Ciudad Industrial con muchos antecedentes, está acusado de ser partícipe necesario en ambos delitos. La instrucción de la causa la hizo el juez Marcelo Benavides y la investigación la realizó la fiscal de Graves Atentados contra las Personas, Sandra González Taboada. Altamirano, que también es de Ciudad Industrial, estuvieron prófugos durante varias semanas.

"Queremos justicia, penas duras. No queremos que se repita lo del caso Galar, que ha sido vergonzoso y no nos vamos a quedar quietos hasta saber que se hizo justicia", reclamó Patricio.

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