El dato de inflación volvió ayer a generar polémica. Pese a que fue levemente superior a lo estimado, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de febrero, que marcó un incremento de un 0,5% según el INDEC, no convence a los expertos ni a la gente común, que paga precios mucho más elevados que los que toma como referencia el organismo oficial de estadísticas.
Las dudas se centraron principalmente en las variaciones informadas en el rubro de los alimentos.
A modo de ejemplo, para el INDEC, estos fueron los precios de algunos productos con los que elaboró la inflación de febrero. Yogur ($1,38, pero en las góndolas ronda los $3); Limón ($5, en verdulerías 14), asado (9,25, en las carnicerías de la región está a $15). (Más detalles en infograma)
De este modo, muchos son los que señalan que el polémico secretario de Comercio, Guillermo Moreno, realizó una nueva maniobra para ocultar la inflación real. Con el dato de que el IPC fue del 0,5 en febrero, pretende instalar la idea de que el problema está en baja, ya que en enero el costo de vida tuvo una suba del 0,9%.
De acuerdo a los datos del INDEC, la leve suba de febrero fue impulsada por aumentos en alimentos, educación y alquileres.
Según los particulares índices del organismo oficial, los alimentos subieron 1,1 por ciento, mientras que los alquileres crecieron 2,1 por ciento y la educación 0,9 por ciento.
De esa forma la variación de precios en los dos primeros meses del año acumuló un avance de 1,4 por ciento.
Antes de conocerse estos resultados los trabajadores del INDEC agrupados en ATE reiteraron hoy su rechazo a la metodología con que se elaboró el índice de precios
Por su parte, los precios mayoristas subieron en febrero 0,8 por ciento y sumaron en el primer bimestre un crecimiento de 1,6 por ciento.
En tanto, el costo de la construcción aumentó 0,6 por ciento y 1,3 por ciento en la sumatoria de enero y febrero.
En el último reportaje que concedió a la prensa, el ministro de Economía, Martín Lousteau, dijo que la "inflación en 2008 irá cediendo".
En 2007 la inflación calculada por el INDEC fue de 8,7 por ciento, pero las evaluaciones privadas la ubicaron por encima del 20 por ciento. De hecho el Gobierno y agrupaciones sindicales comenzaron pactar subas salariales del 19,5 por ciento.
La inflación minorista de febrero estuvo impulsada por los alimentos que aumentaron 1,1 por ciento, destacándose las subas en aceites (2,6 por ciento), carnes 1,9 por ciento y productos panificados (1,8 por ciento).
Con este comportamiento en el primer bimestre el precio de los alimentos creció 1,8%.
(Redacción Central y DyN)