SAN MARTÍN DE LOS ANDES (ASM).- La intendenta Luz Sapag utilizó 80 minutos para la lectura de un mensaje de 22 carillas, en la apertura de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, con un profuso detalle de obras y proyectos más propio de un final de gestión que de apenas 60 días de gobierno. En los primeros párrafos de ese escrito pidió recuperar el rol hacedor y moderador del estado, fortalecer y modernizar la gestión de gobierno. Y hubo cierre con aplausos, desde los cuatro costados del recinto.
Ante el pleno de los concejales y flanqueada por los miembros de su gabinete, Sapag también anticipó el lanzamiento de un plan de blanqueo de construcciones irregulares; la puesta en marcha de un banco de tierras para fines sociales y productivos; la regularización, actualización y control del estatus legal de bienes inmuebles municipales; la readecuación del desvencijado parque automotor y la compra de nuevas unidades; el lanzamiento de un plan para lograr certificaciones de calidad en servicios gastronómicos y turísticos; el inicio de estudios que serán la base de nuevos planes y perfiles de urbanización; la multiplicación de gestiones para las futuras nuevas plantas de tratamiento de líquidos y el desarrollo de planes de obras con efecto en los barrios.
También hizo advertencia de una política salarial austera pero conciliadora con los municipales, y enfatizó el esfuerzo por mejorar la recaudación propia del municipio, para consolidar su autonomía y evitar la extrema dependencia de la coparticipación.
Pero, en cualquier caso, Sapag puso el acento en la necesidad de reordenar el municipio, de poner prolijidad y previsibilidad en cada uno de los actos de gobierno. Del mismo modo, llamó a recuperar el rol del estado, de los políticos y de la política.
En ese sentido, los que siguen son algunos de los párrafos más salientes: "Ha sido parte del juego ideológico de los últimos años, la descalificación sistemática del quehacer político, poniendo la esperanza salvadora en el mercado, así como en otras épocas se recurría a los golpes militares y a los gobiernos 'fuertes' ".
Pero "la ausencia o debilidad del estado democrático, y de sus órganos naturales, para resolver los problemas de toda la comunidad, llevó a que la natural lucha de intereses se dirimiera fuera o hasta por encima del gobierno que debe intervenir para el logro del bien común y de una sociedad más justa y equitativa".
Frente a se cuadro, dijo Sapag, "nuestro objetivo en esta gestión de gobierno es trabajar para el fortalecimiento del Estado y la modernización de la gestión municipal".