ROCA (AR).- Con una doble fractura de maxilar, cuatro costillas fracturadas y un severo problema en uno de sus riñones, el joven que fue golpeado el fin de semana en las 500 Viviendas y en medio de un confuso episodio, se encontraba internado ayer en terapia intensiva del Sanatorio Juan XXIII. Sus padres denunciaron que fueron al menos diez policías los que lo castigaron "salvajemente".

En las puertas del centro asistencial de esta ciudad, Noria Sansano y Enrique Marinao, los padres de Elio, de 27 años, relataron que el domingo cerca de las 10, el joven llegó al núcleo 40 de las 500 Viviendas, y tras de una discusión "por una remera" con su hermano menor, se generó una disputa familiar que no pasó a mayores.

Pero luego llegaron los efectivos de la comisaría 31, quienes comenzaron a discutir con el joven. "Eran por lo menos diez, y mientras mi hijo intentó subir a su moto, uno de ellos le pegó con una Itaka por la espalda. Luego se le fueron todos encima y comenzaron a patearlo", relató la mujer, quien aseguró que por un problema de salud no pudo bajar las escaleras, pero que desde el tercer piso del edificio pudo observar la agresión. Incluso una de las hermanas de la víctima también habría sido golpeada cuando intentó evitar la paliza.

Enrique Marinao relató ayer que se presentó ante la Fiscalía para realizar la denuncia, ya que su hijo fue golpeado por los policías con suma violencia. "Incluso tiene los botines marcados en el cuerpo", dijo.

Un primer informe del propio médico policial el domingo, indicaba que "estaba muy mal" por lo que se ordenó trasladarlo al hospital. La víctima, quien trabaja en el Departamento de Aguas, tuvo que ser derivado al Sanatorio Juan XXIII, donde ayer permanecía en estado delicado en terapia intensiva.

En su edición del lunes, "Río Negro" informó sobre la disputa que se había generado en el barrio aunque en esa oportunidad, el comisario Darío Potás, quien aseguró que el joven sufrió la lesión maxilar previo a la intervención policial.