NEUQUÉN (AN).- El juez Cristian Piana comenzó a tomar ayer declaración testimonial a parte de los 13 efectivos que desfilarán por su despacho hasta el viernes próximo, y que fueron convocados a pedido de la defensa de cuatro jefes imputados en la causa Fuentealba II, que investiga el presunto encubrimiento y las responsabilidades de quienes participaron del operativo en Arroyito el día del asesinato del docente.

Ayer declararon Leonardo Veroiza y Rubén Sandoval. Veroiza fue uno de los oficiales que estaban en la ruta durante el operativo. Hizo un relato de cómo fue agredido, supuestamente por manifestantes, señaló que esto está filmado. Dijo que él tuvo que ser enviado a un hospital en Senillosa, con lo cual quedó desafectado del operativo.

Entre los policías que están citados figura Juan Carlos Lepén. La estrategia de la defensa es que estos testimonios permitan deslindar de responsabilidades a cuatro imputados: Moisés Soto (actual comisario general), Adolfo Soto (comisario general), Mario Rinzafri (comisario mayor) y Aquiles González (subcomisario). Sandoval concurrió para contar al juez cuáles fueron las actuaciones que se hicieron para dar con el autor del disparo a Fuentealba.

Con su relato, la defensa, a cargo del abogado de la policía Gustavo Lucero, busca contrarrestar el argumento de que los efectivos trataron de encubrir al cabo Darío Poblete, acusado de disparar a Fuentealba, de cuyo asesinato se cumplieron ayer 11 meses.

Fue Sandoval quien recibió las declaraciones testimoniales que señalan a Poblete, de boca de tres policías de grupos especiales, según el planteo de la defensa, y que una vez reunida esta información se informó a la Justicia.