El titular de la CGT, Hugo Moyano, pareció encaminarse ayer hacia un seguro segundo mandato al frente de la central sindical, luego que la mayoría de los miembros del consejo directivo cegetista lo acompañara en el acto que se realizó en el Club Español. Sólo faltó su enemigo declarado, el gastronómico Luis Barrionuevo
Respaldaron a Moyano el secretario adjunto de la CGT, José Luís Lingeri; el taxista Omar Viviani; el ferroviario Omar Maturano; el titular de las 62 Organizaciones Peronistas, Gerónimo Venegas; el colectivero Juan Manuel Palacios; el judicial Julio Piumato; Juan Carlos Schmitd de Dragado y Balizamiento; Oscar Mangone del Gas; el panadero Abel Frutos y el ceramista Domingo Moreyra.
El 7 de junio próximo, Moyano cumplirá cuatro años al frente de la CGT y deberá convocar al Congreso Ordinario de esa central que deberá elegir una nueva conducción. En ese contexto y pese a las disputas internas en el seno de la conducción cegetista entre moyanistas, gordos y barrionuevistas, hasta ahora el camionero es quién tiene mayores chances de continuar manejando la CGT por un período más.
Desde que asumió la secretaria general de la CGT, en el 2004, Moyano debió superar varias crisis en la conducción cegetista donde de arranque compartió el cargo con Susana Rueda por entonces un ariete del sector de los gordos para no dejar todo el poder al camionero. Con posterioridad, sufrió el alejamiento del sector de los gordos de la cúpula cegetista y luego los sucesivos embates de Luis Barrionuevo para debilitar su poder. (DyN)