VILLA LA ANGOSTURA(AVLA).- "La temporada fue muy buena, y febrero superó las expectativas", aseguró el secretario de Turismo local, Juan José Fioranelli sobre los dos meses de mayor afluencia del año. La primera quincena de enero no fue tan buena como se esperaba -incluso el índice de ocupación fue inferior al mismo período del verano anterior- pero ya en la segunda se revirtió la tendencia y en febrero la villa se colmó de turistas.

"Hubo menos movimiento los primeros 4 días del año, pero hubo mas en febrero. En parte se debe a la afluencia de turistas chilenos y al éxito de la fiesta de los jardines que este año convocó mucha gente. Durante la fiesta hubo récord de turistas. Comparativamente con años anteriores, febrero no resultaba tan bueno", señaló el funcionario. En los cuatro días de la Fiesta de los Jardines se registraron picos del 99% de ocupación hotelera.

"Fue una temporada muy buena, hay quien dice que el año pasado hizo algún punto mas, pero en general fue muy buena, similar a la del verano anterior. La temporada fue muy esperada porque desde semana santa hasta enero venia muy difícil", sostuvo Marita Miles, presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Villa La Angostura.

Según datos estimativos, este año habría arribado una mayor cantidad de turistas. No obstante, ese incremento no habría tenido su correlato en el movimiento económico. "La gente se cuidaba en los gastos, pero excursiones han hecho, una o dos tomaban siempre, quizás las más clásicas. El buen clima hizo que se aprovechara el lago y la playa", agregó Miles.

Tal como sucediera en otras localidades turísticas, esta temporada las tarifas de alojamiento sufrieron una suba de casi el 20% respecto del verano anterior; situación que se sumó al incremento generalizado de precios producto de la inflación.

"Hubo más gente, pero gastó menos. Para los restoranes y hoteles, si le preguntás, tuvieron una excelente temporada, pero en los comercios más "prescindibles", no se vendió tan bien. Es que la gente gasta en lo básico, alojamiento y comida, el resto es lo primero que se corta", detalló un comerciante de "regionales".

Algunos prestadores de servicios de turismo aventura advirtieron una merma importante de trabajo durante la última temporada. A pesar de que en La Angostura las excursiones de aventura cuestan la mitad que en Bariloche, para muchos el balance de la temporada fue negativo. "Particularmente me bajó un 42% el trabajo en enero y en febrero un 60% comprando con la temporada anterior. En noviembre y diciembre no se trabajo nada. Hasta el año pasado veníamos creciendo todos los años", explicó Peter Hyland, propietario de una empresa de alquiler de kayak.

"La gente tenía menos plata, el turista de alto nivel adquisitivo se fue a veranear al exterior", apuntó.