EL BOLSÓN (AEB)- La mayoría de los concejales decidió que la comisión investigadora de juicio político contra el intendente Romera (UCR) no estará integrada por el juez de Faltas Diego Medina sino por un ciudadano a designar.
La prolongada reunión del Concejo constituido en comisión única terminó con el retiro abrupto de los radicales Trotta, Gori y Maggi. Cecilia Gori, quien en principio integraría dicha comisión, anticipó que no se prestarán a conformar un cuerpo que contraría lo dispuesto en la Carta orgánica.
Ello porque en el articulado que rige el procedimiento se establece que la comisión deberá estar compuesta por el juez de Faltas, un edil de la mayoría y otro de las minorías. Paola Sanna (FpV) fue la designada por la segunda minoría.
Sin embargo la cosa no es tan simple. Primero porque en el escrito inicial del ciudadano peticionante -Julio Muslera-, se recusaba al magistrado de movida. Además, el jueves el mismo Muslera presentó una ampliación del juicio contra el juez de Faltas por su papel en los disturbios de la plaza Pagano del 2 de febrero último, motivo central de la petición en contra de Romera.
Desde las 11 hasta pasadas las 16 se extendió la discusión de los siete concejales, centrada fundamentalmente en el tema del juez de Faltas.
Para los radicales, Medina debía formar parte de la comisión investigadora contra Romera -y así lo mocionaron- pues consideraron que la recusación no era válida y que la ampliación de pedido de juicio político contra el magistrado no fue el motivo de la reunión convocada ayer.
Del otro lado, Jesús Güenuleo (Partido Acción y Solidaridad) fundó su argumento en que el juez de Faltas tuvo participación en los hechos de la plaza Pagano y que, por lo tanto, no sería independiente a la hora de investigar lo sucedido, más aún porque su papel fue cuestionado.
Otra razón esgrimida por los concejales no radicales fue que integrado el trío investigador con un ciudadano común, el cuerpo así constituido podría dar curso a los dos pedidos de juicio, con ahorro de tiempo, energía y recursos.
Sometida a votación la primera moción de los radicales, estos salieron perdidosos. Correspondía entonces considerar la moción de Güenuleo, momento en que los tres radicales abandonaron el recinto por las razones referidas.
