VIEDMA (AV)- La comunidad política está cada vez más cerca de avanzar en la expropiación de la manzana histórica de Viedma. El valor del edificio es menor a la deuda de $ 300.000 que el propietario mantiene por tasas con el municipio, según planteó el intendente Jorge Ferreira.

El jefe comunal, concejales y legisladores -oficialistas y opositores- recorrieron esas instalaciones que actualmente son alquiladas por el municipio y donde funcionan el Tribunal Electoral, la Fiscalía y el Juzgado de Faltas.

Ferreira consideró que "la intención es utilizar este valioso edificio para la comunidad", expresó el intendente en dirección hacia la expropiación. Dijo sentirse respaldado por la comunidad para lograrlo.

Informó que está planteado recuperar la planta alta de esa estructura, para lo cual ya se han hecho algunos proyectos y cálculos de gastos. También dio a conocer que se renovó el contrato de alquiler por otros tres años, lo que permitirá trabajar con tranquilidad en ese tiempo.

Destacó que esas instalaciones poseen un gran valor cultural e histórico para los viedmenses, que está muy relacionado con la identidad de esta capital.

La actual gestión le hizo varias ofertas al propietario, el abogado y ex legislador Tomás Rébora. El edificio pasó a manos privadas en la década pasada cuando la iglesia decidió desprenderse del inmueble donde funcionó el viejo colegio salesiano y en una de sus aulas estudió el beato Ceferino Namuncurá.

Un ala del edificio ya había sido vendida en la década '70 y otros terrenos de la misma manzana también son de privados, a excepción de un sector que fue donado a la Comisión del Bicentenario de la ciudad.

El área que le correspondió a Rébora habría sido pagada en 60.000 dólares durante la época de la paridad cambiaria "uno a uno". De acuerdo a los registros municipales, el abogado le estaría debiendo 300.000 pesos a las arcas municipales. El abogado ya abonó otras deudas mediante causas judiciales.