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"El arte de dirigir es puramente emocional" | ||
El director español Salvador Sebastián López estará al frente, como invitado, de la Orquesta Sinfónica de Neuquén. Los conciertos serán hoy y mañana a las 22 en el auditorio de la agrupación. | ||
NEUQUÉN (AN).- "Cuando subes al podio te engancha. Yo quería ser clarinetista, pero subí a dirigir y me enganchó para siempre". Salvador Sebastián López, director de orquesta y compositor español viajó desde su Valencia natal para dirigir como invitado la Orquesta Sinfónica de Neuquén, con un repertorio que unirá musicalmente Argentina con España. Los conciertos se realizarán hoy y mañana, a las 22, en el auditorio ubicado en Leguizamón 328. Las entradas tienen un valor de quince pesos las generales, y de diez pesos para jubilados y estudiantes. Se pueden adquirir en el local de Todomúsica de avenida Argentina 261 o en el auditorio, antes del concierto. El repertorio sensual, vibrante, festivo y nostálgico, incluirá las obras "Preludio" de la argentina Claudia Montero, "Le tombeau du Couperin" de Joseph Maurice Ravel, "La oración del torero", del español Joaquín Turina Pérez y "El amor brujo" de Manuel de Falla. Estas piezas no fueron seleccionadas al azar, tienen un sentido, se intenta unir a través de la música la vida y sentir de dos pueblos separados por el océano pero estrechamente unidos por hermandad. "Es un programa muy bonito, empieza con el preludio de Claudia Montero que es argentina y vive en España; luego pasa por Ravel que tenía mucha influencia española porque su madre era española, y luego termina de Falla que es un autor que luego de la Guerra Civil emigró a la Argentina. Un argentino en España, un español en Argentina, ese es el hilo conductor del concierto", explicó López. El español es director titular de la Orquesta y Banda Sinfónica de la Sociedad Musical Instructiva "Santa Cecilia" de Cullera. Como compositor creo las obras "Sonata para tuba" seleccionada como obra obligada del concurso de tubas de la Ciudad de Altea, "La leyenda de la Malinche", obra obligada para el certamen de Diputación y "El Luthier de Venecia", entre otras. -¿Qué aporta el intercambio de directores, a las orquestas y a los directores? -Se trabaja intensamente y siempre hay un desgaste porque se está muy encima de ellos. La orquesta aprende, ve otra forma de trabajar y eso da aires nuevos y crecimiento. Al director le permite no confiarse, porque muchas veces tu adaptas tus gestos a tu orquesta, luego vas a otro sitio y ese gesto no funciona. Entonces ayuda a mantener un poco la atención en tu técnica de dirección. -En la dirección los gestos son claves... -Sí, se debe utilizar cada parte del cuerpo para lograr transmitir la estética y la precisión de la obra. Lo bueno es llegar a no estar siempre marcando y estar más con la música con la estética. Este repertorio tiene mucha influencia de la técnica impresionista, es todo perfume, muy sensual y orquestas como la de Neuquén te permiten esa elasticidad. -¿Qué características tienen las obras de este repertorio? -El preludio es un sentimiento nostálgico, relajado. La pieza de Ravel es muy refinada, de un autor clásico que Ravel orquestó ye s como si tuvieras una estatua y le agregaras lentejuelas, adornos y a refinarla, es muy sensual y elegante. El amor brujo es gitanería, brujería, cantejo español, orientalismo. | ||
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