Después de que ETA hiciera estallar en la madrugada una bomba junto a una sede socialista en el País Vasco, el gobierno español subrayó hoy que las fuerzas de seguridad están en "alerta máxima" para garantizar la seguridad frente a la "sinrazón" del grupo independentista armado vasco.
El gobierno, dijo en rueda de prensa la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, "no ha bajado la guardia jamás" frente a ETA. "Frente a la sinrazón terrorista siempre hay que estar alerta", indicó.
El atentado de la madrugada junto a la sede socialista de la localidad vizcaína de Derio no dejó heridos, pero sí daños materiales en el local. La bomba estaba compuesta por tres kilos de explosivo. Las instituciones y los partidos, con excepción de los considerados sucesores de Batasuna, el ilegalizado brazo político de ETA, condenaron el ataque.
Justo antes del inicio de la campaña electoral para los comicios generales del próximo 9 de marzo en España, el Ministerio del Interior puso a las fuerzas de seguridad en máxima alerta antiterrorista por temor a atentados etarras y sin descartar posibles acciones del islamismo radical en el país.
El nivel 3 del llamado Plan de Prevención y Protección Antiterrorista activado de cara a las elecciones implica la movilización total de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que cuentan con el apoyo de las Fuerzas Armadas para vigilar grandes infraestructuras de transporte, como aeropuertos o estaciones de tren, zonas estratégicas, por ejemplo plantas de electricidad o gas, centros comerciales y el espacio aéreo.
La seguridad se incrementa además en los acontecimientos relacionados con el proceso electoral, tales como mítines, así como de las sedes de los partidos políticos, los lugares donde estén previstos actos públicos y los colegios electorales.
El de esta madrugada fue el segundo atentado de ETA durante la campaña electoral. El pasado día 23, el grupo armado colocó una bomba con cinco kilos de explosivo junto a un repetidor de televisión en un monte de Bilbao. Tampoco en aquella ocasión se produjeron heridos. Un robot de la Ertzaintza, la policía autónoma vasca, quedó destrozado cuando el artefacto explotó mientras lo manipulaba.
Fuente: DPA
