BUENOS AIRES y NEUQUÉN (ABA/AN) - El gobernador neuquino Jorge Sapag se llevó ayer de la reunión con el ministro del Interior, Florencio Randazzo, el apoyo nacional más firme que recibieron las presas Chihuido I y II. Junto al rionegrino Miguel Saiz consiguió además 28.000.000 de pesos para obras de defensa y captación de agua para consumo humano, en compensación por el manejo que Nación hace de los embalses para que no falte hidroelectricidad en el invierno.
Del encuentro no participó el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, que en ese momento estaba con una audiencia con el actor y funcionario Lito Cruz; en su remplazo, fue la ministra de Infraestructura bonaerense, Cristina Álvarez Rodríguez.
Tras la reunión, el gobierno neuquino reveló que está creada en el ámbito de la provincia la Unidad de Gestión Chihuido I y II, bajo la presidencia de Elías Sapag (hijo), que este año conduce el comité ejecutivo de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC).
Lo que se reunió ayer en la Casa Rosada fue el órgano de gobierno de la AIC, compuesta por los gobernadores de Neuquén, Río Negro y Buenos Aires, y presidido por el ministro del Interior.
Elías Sapag, que es hermano del gobernador, aseguró que por primera vez se manifiesta la firme "decisión política" del gobierno nacional de acompañar las obras por sobre la lucha excluyente de los intereses empresarios.
Un consejo coordinará el trabajo entre una representación de Nación, y otra de la provincia, e integrada por el Órgano Regulador de Seguridad de Presas y representantes de la Universidad Nacional del Comahue.
Para dar un primer paso, se encontró esta semana la comisión de Medio Ambiente, y ya hay vuelos de técnicos de la subsecretaría de Recursos Hídricos para explorar el lugar donde se levantarán las presas.
A fin de año, además, habrá un encuentro de los gobernadores similar al de ayer.
Tras la reunión, los gobernadores no quisieron hablar, y Randazzo, a través de un comunicado, señaló que la reunión fue producto de la decisión política para coordinar acciones que optimicen al aprovechamiento de los recursos hídricos.
Planificación hasta el 2011
En el encuentro se acordó "un programa de trabajo hasta el 2011", que incluirá medidas urgentes -como una planificación de la utilización de las aguas de los ríos Limay, Negro y Neuquén-; y otras de más largo plazo como los Chihuidos, señaló Elías Sapag.
Se habló de las consecuencias de el modo en el que el gobierno nacional maneja los embalses, que hizo que la semana pasada el de El Chocón casi llegara a su mínimo operable, situación a la que podría regresar el lunes que viene.
De los 28.000.000 de pesos comprometidos para obras, cada provincia recibirá la mitad. "La Nación va a aportar para compensar el esfuerzo de las dos provincias", lo justificó el presidente de la AIC.
El gobierno nacional sigue con atención el comportamiento de los embalses, ya que ante una caída en el suministro de gas desde Bolivia, el mayor peso para tratar de sobrellevar la crisis energética dependerá del buen funcionamiento de las hidroeléctricas ubicadas en las represas de la región.