La Junta Electoral del radicalismo de Bariloche, designada por la intervención, todavía debe evaluar su legitimidad, pero dio a entender ayer que a las dos candidatos para la interna del 16 de marzo les sobrarán avales, porque el piso mínimo ronda las 85 adhesiones.

En este sentido, se informó que el legislador Marcelo Cascón presentó 800 firmas que avalan su candidatura a intendente y Carlos Leiva unas 350.

Cascón sostiene que ese número debía rondar los 700 porque la Carta Orgánica partidaria impone que los avales no sean menos que "el uno por ciento del padrón general local".

Aunque la interna es abierta (podrán votar radicales e independientes), uno de los integrantes de la Junta Electoral, Gerardo Josep, dijo que a criterio de ese cuerpo el número de avales debe tomarse en relación al padrón de afiliados de la UCR.

"Esta no es una elección anticipada y tomar en cuenta el padrón general sería una actitud proscriptiva", aseguró.

Cascón no decidió todavía si llevará esa disputa a otra instancia.

Mientras tanto, el legislador exhibió el apoyo casi unánime de las líneas internas de su partido y sugirió -sin detallar nombres- que la insistencia de Leiva en presentarse a la interna de marzo se origina en "un intento foráneo de embarrar la cancha".

Un comunicado difundido el lunes con la firma de una decena de dirigentes ratificó que la unidad conseguida para acompañar a Cascón es "una muestra de madurez y sensatez" .

Señalaron que la actual situación encuentra a "todos los radicales de Bariloche con objetivos comunes de trabajo". (AB)