SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La fiscal Mirta Siedlecki apeló el sobreseimiento de los empleados de Joaquín Pandolfi que tiraron el cerco y ocuparon el campo de la familia Linares, viejos pobladores del paraje Pichileufu. El juez Miguel Gaimaro Pozzi consideró que "nada puede reprocharse" Ricardo Pastor y Facundo Logreco pues actuaron bajo las órdenes de Pandolfi, en un margen de "error que les impidió comprender la criminalidad del acto".

El magistrado dispuso el sobreseimiento "total" de los dos trabajadores acusados de "usurpación", decisión apelada por la fiscal que consideró "prematuro" el fallo y pidió la citación de Pandolfi entre otras medidas. La continuidad de la investigación penal o el cierre del proceso será resulto esta semana por la Cámara primera del Crimen.

En su resolución Gaimaro Pozzi dio por probado que en mayo de 2007 los acusados tiraron abajo el alambrado que dividía los campos de Linares y Morris -este último adquirido por Pandolfi- y entraron con maquinarias viales en las tierras de los antiguos pobladores para abrir un camino de 3.000 metros hasta el río.

Pero, en contrapartida, ponderó la relación de dependencia de los trabajadores y el hecho de que Pandolfi era "beneficiario del permiso de ocupación otorgado por al dirección de Tierras y Colonias".

Sin abrir juicio sobre la validez del permiso irregular otorgado por la provincia, el magistrado aseguró que la situación de Pastor y Logreco "podría resolverse de distintas maneras con un único resultado, el sobreseimiento de los prevenidos".