El intendente de Pinamar, Roberto Porretti, insistió ayer ante la Justicia de Dolores para no ir preso: justificó en la Cámara Penal por qué debe seguir libre tras la acusación de extorsión a un complejo bailable, pero aprovechó para hacer una "jugada" similar por la nueva denuncia que lo salpica junto a su ex secretario de Gobierno, que está detenido.
Es que el abogado José Ignacio Ochoa, defensor de Porretti, planteó ayer un recurso de exención de prisión por la nueva causa que se abrió tras la denuncia "por extorsión y desbaratamiento de derechos" del dueño de un parador y que complica al detenido Aldo Leonián y también a Porretti.
El viernes pasado José Summer Sasin, propietario del parador El Límite, afirmó que Porretti y Leonián pusieron trabas a la habilitación de su negocio "con fines claros de obtener un beneficio económico o directamente la apropiación de mi comercio". Y, según la denuncia que deberá ser ratificada mañana, "Leonián le manifestó: 'Hablé con Porretti y todo esto lo pueden solucionar con plata; dame el okey y yo te digo los montos'".
Pese a que no había ningún pedido de arresto promovido aún por la fiscal Liz Brestolli que analiza el caso, la defensa presentó ahora este escrito, que fue rechazado este mediodía por el juez de Garantías Luis Niti, según revelaron las fuentes consultadas ayer.
No obstante, Porretti abrió así la puerta para evitar una eventual orden de arresto: ahora la defensa tiene posibilidades de recurrir en los próximos cinco días a la Cámara de Apelaciones y Garantías de Dolores, donde ayer el abogado Ochoa desfiló para justificar por qué su cliente no debe ir preso en la primera causa abierta contra el funcionario.
El 13 de febrero pasado la fiscal María Fernanda Hachman hizo un procedimiento en el que detuvo a Leonián pero fracasaron las diligencias para encontrar a Porretti, que -inmediatamente- presentó el recurso que permitió congelar la detención hasta que la Cámara lo analizara. (DyN)
