JORGE GADANO

LAURA LONCOPAN BERTI

Los emprendimientos cerrados ubicados en zona ribereña poseen una característica común: se presentan como refugios naturales cercanos a la ciudad. Paraísos vírgenes con lagunas y bosques vivos que anuncian, según sus operadores, una nueva forma de libertad: el espacio privado.

Club house con gimnasio y spa, piletas de natación para adultos y niños, canchas de tenis, fútbol, golf, voley, bicisendas, plazas, pista hípica, forman parte de la infraestructura ofrecida por los complejos costeros. En cuanto a los servicios, algunos plantean la conexión a la red general y otros la construcción de plantas propias.

Un grupo de inmobiliarias de Neuquén y Cipolletti es la que controla la comercialización, generalmente, a través de la venta de fideicomisos. Se calcula que en los proyectos de 150 lotes, el valor por metro cuadrado es, en promedio, de 60 dólares. Son 180 hectáreas, considerando los cinco grandes proyectos, que ocuparán la región de la costa.

Si bien son publicitados como "barrios privados o cerrados", la mayoría ingresa por sus dimensiones, en la categoría de club de campo, en orden a la reglamentación municipal. La superficie oscila entre los 800 y 2000 metros cuadrados.

La ordenanza 10573 de urbanizaciones cerradas establece, respecto a la localización autorizada, que "en las zonas contiguas a los ríos Limay y Neuquén tendrán la restricción de uso sobre el espacio destinado del paseo costero". El subsecretario municipal de Gestión Ambiental, Carlos Roca, afirmó que la franja debe tener como mí

nimo quince metros en vez de 35 como figura en el Código Civil (camino de sirga). "Se alineará con el Paseo de la Costa, lo cual no implica que será un paseo peatonal y vehicular", sostuvo.

Los agentes que representan a los emprendimientos admiten que deberán dejar el camino de sirga, sin embargo sortean este "obstáculo" con frases como "tendremos cámaras de seguridad", "eso no será un balneario" o "usted tendrá pleno acceso". Las aclaraciones son necesarias, ya que los terrenos lindantes al río son los más caros.

Carlos Chaneton, subsecretario municipal de Gestión Urbana, dijo que están tratando de que cumplan con los 35 metros, que es también lo que recomienda Recursos Hídricos provincial. Los proyectos de barrios cerrados que tienen en carpeta son 28, de los cuáles ocho están en la ribera, entre los que se incluyen los del Paseo de la Costa y los de Valentina Norte y Sur. Las propuestas son generadas por dueños de chacras que dejan en producción un sector y luego lotean el otro para un barrio, grupos de profesionales, como arquitectos o médicos, ex funcionarios provinciales, o desarrolladores de Capital Federal que vienen a invertir.

Hay tres etapas posibles de avance: el informe de evaluación ambiental, la declaración ambiental y mensura, y la firma del convenio urbanístico. El 25 por ciento de las iniciativas cuenta con la factibilidad urbano-ambiental, y sólo uno ha firmado el convenio urbanístico (decreto 193/07). El resto no prosiguió con los trámites luego del informe de evaluación.

Desde la subsecretaría municipal de Gestión Ambiental se informó que fueron presentados 24 estudios de impacto ambiental en el 2007 correspondientes a loteos y subdivisiones. Julián Villar, presidente del Colegio de Arquitectos de Neuquén, advirtió que la ausencia del estudio no les impide colocar los paquetes en el mercado. "Si no lo tienen aprobado hacen una pre- factibilidad de venta". Y agregó: "muy pocos han acercado la documentación aprobada por el Colegio; nosotros la estamos reclamando".

Espacio público

"Si uno ve los proyectos, hay una tendencia a respetar el camino de sirga, después al momento de la ejecución, es cuando el alambre se estira y llega hasta las aguas, y guarda con pasar ese alambre", aseguró Villar. Recordó que los antecedentes del vallado en los clubes de Plottier y la imposibilidad de transitar el río Neuquén a la altura del Rincón Club de Campo, obligan a estar atentos.

Roca contó que fue difícil acordar la cesión con los desarrolladores. Además de la franja libre deben garantizar las calles de acceso, y la entrega de un seis por ciento destinado al dominio privado municipal para los barrios privados, y de un cuatro por ciento para los clubes de campo.

"Hay algunas denuncias por movimiento de suelos", dijo Roca. En Valentina Sur, los vecinos se quejan porque el complejo se ha interpuesto entre ellos y el río. "Tenemos que hacer todo un recorrido para llegar y bañarnos; espero que nos dejen pasar", afirmó uno de los chicos camino al Limay.