CIPOLLETTI (AC).- El policía que manejaba el patrullero que llegó primero al lugar del hecho, aseguró ayer que antes de recibir el llamado del comando alertando que debían ir hacia el laboratorio, vio el auto de Juan Carlos Aguirre estacionado en ese lugar. Estimó que esto ocurrió unos "20 minutos antes". Pero uno de sus compañeros que iba en el móvil ayer no lo recordó.

La defensa de los imputados cuestionó duramente este "anexo" del testigo José Becerra.

"No lo declaró hace nueve años, a pesar de que estuvo en la comisión investigadora", reprochó Jorge Larrea. Y agregó: "¿cómo (Enrique) Gutiérrez, que también iba en el patrullero no vio nada?".

La querella, tal como sucede en cada jornada, revalorizó este dato y lo sumó como una pieza más "del rompecabezas que se va dibujando".

"Becerra ve el auto estacionado... por ende 15 ó 20 minutos antes (Aguirre) estaba ahí. ¿Qué se quedó esperando?", se preguntó Oscar Pandolfi, abogado de las hermanas de Ana Zerdán.

En la jornada de ayer declararon cuatro testigos de los siete que incluía la lista. Se habló de estos primeros minutos en el laboratorio, de las actitudes de Aguirre padre en la comisaría Cuarta y de la entrega de la llave del auto de la víctima que realizó Juan Manuel.

Los primeros testimonios que se escucharon en la 12º audiencia fueron los de Enrique Gutiérrez y José Becerra, dos de los tres policías que andaban en el patrullero que recorría la zona céntrica y

el barrio San Pablo en la noche del crimen.

Los testigos relataron que cuando llegaron al lugar, Juan Carlos Aguirre estaba en el hall del laboratorio y los hizo pasar. "Ahí está, miren cómo la dejaron", dijo Becerra que les expresó el imputado. "¿A quién?", le preguntó él. "A mi señora", respondió Aguirre.

El lugar estaba en penumbras y ellos se alumbraron con una linterna para acceder al sitio donde se hallaba el cadáver. "Vimos un bulto tirado, un charco de sangre", manifestó ayer el policía. Al igual que su compañero Gutiérrez aseguró que no se acercaron; que retrocedieron y no tocaron "nada" (ver aparte).

Becerra expresó que luego Aguirre les indicó: "por acá entraron", mostrándoles una ventana que daba a un patio interno. No observó pisadas.

Su relato fue atacado por la defensa porque en la instrucción el policía había dicho que "se percató" que la ventana estaba abierta y ayer afirmó que fue Aguirre quien se lo dijo.

"No es lo mismo decir 'me dijo' que manifestar que cuando usted se iba 'se percató'", le hizo notar efusivo Larrea.

"Por acá entraron, me dijo (Aguirre)", le respondió ofuscado el policía. Y aseguró que este dato, si bien no quedó asentado en su declaración, se lo explicó oportunamente al juez de instrucción y a la fiscal que investigaba el caso.

Larrea volvió a la carga con otro dato que sumó el testigo: Becerra dijo que mientras patrullaban esa madrugada vio el Peugeot 405 de Aguirre estacionado frente al laboratorio

antes de que recibieran la llamada advirtiendo que debían ir para allá. Estimó, en base al recorrido, que pudo ocurrir 20 minutos antes.

"Recuerda haber declarado que ese auto estaba ahí", empezó el defensor, despertando una nueva reacción del policía que le respondió: "yo dije que lo vi antes".

Larrea, como lo hizo con Graciela Edorna, hizo reserva de solicitar una investigación por falso testimonio con respecto a Becerra. Su pedido generó un nuevo enfrentamiento entre las partes. "Es la segunda ocasión que el doctor Larrea hace esto. Si el delito existe se tiene que denunciar, esta manifestación no es neutral para futuros testigos", recriminó el querellante Gustavo Palmieri. Larrea intentó explicar que hace reserva porque "faltan testigos", pero no convenció a la querella. El juez Guillermo Baquero Lazcano terminó el cruce diciendo que "no está prohibido (hacer reserva) y que por lo tanto está permitido".