NEUQUÉN (AN).- El secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas, Guillermo Pereyra, anticipó que desde la semana próxima comenzará a plantear un incremento salarial del 35% para todas las categorías y, además, amenazó con separarse de la federación nacional que agrupa a todos los gremios del sector y que el neuquino buscaba presidir.
Señaló que los motivos para esta posible separación hay que buscarlos en que la intención de "terminar con el centralismo autoritario de sindicatos que tienen 50 afiliados y quieren conducir los destinos de todos los petroleros del país".
Sostuvo que el plan que impulsará es llevar al gremio de Neuquén y Río Negro a la conformación de un bloque sindical único, en conjunto con el resto de las provincias patagónicas, por fuera de la organización nacional.
"Tenemos el 53% de los afilados del país en las dos provincias. Contamos con una legitimidad suficiente como para comenzar a recorrer nuestro camino", dijo Pereyra en un diálogo telefónico con "Río Negro".
Una de las aspiraciones que había hecho pública durante los últimos meses fue la de quedarse con la conducción de la entidad de la que ahora busca dar un paso al costado. "A mí estar al frente de la Federación no me quita el sueño", señaló.
Habló de un "complot entre el Ministerio de Trabajo de la Nación y la actual conducción" de la entidad que agrupa a todos petroleros.
Sobre esto, indicó que el conflicto surgió porque "no nos reconocen todos los delegados que deberían, de acuerdo con la cantidad de afiliados que hay en las dos provincias".
Agregó que "nos deberían reconocer un delegado cada 500 trabajadores", un parámetro que según indicó no se está contemplando.
También cargó contra la conducción de la entidad nacional, que "quiere pelear aumentos más chicos de los que hay que pelear".
Pereyra señaló que 15.200 de los 28.000 afiliados del gremio nacional están dentro de la organización que conduce. Indicó que "en las próximas horas" el gremio local realizará un plebiscito puertas adentro. Se trata de un paso reglamentario, ya que necesitaría conseguir el aval del 75% de los afiliados para comenzar con los trámites de desafectación de la entidad nacional.
"Estamos en contacto con los sindicatos de Chubut y Santa Cruz. Hay algunos acuerdos para transformar el bloque patagónico en un único gremio, que tenga su propia obra social", dijo.
