La actividad económica creció 8,7 por ciento en el 2007 e hilvanó cinco años consecutivos de expansión, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Este resultado se alcanzó luego de que en diciembre el Producto Bruto Interno (PBI) mostrara un alza de 9,7 por ciento con relación a igual mes del 2006 y un avance de 0,6 por ciento frente a noviembre.
Además, con el resultado de diciembre el PBI suma 61 meses de crecimiento ininterrumpido en la medición interanual, desde diciembre del 2002.
Los datos corresponde al Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), un indicador que el INDEC difunde en forma mensual a modo de adelanto de la evolución del PBI que se divulga trimestralmente.
El crecimiento económico estuvo impulsado por el consumo, la actividad industrial y el sector agropecuario.
El 2007 se convirtió en el quinto año consecutivo de crecimiento económico superando el ritmo de avance que se había alcanzado en 2006 (8,5 por ciento). Si se evalúa el período 2002-2007 el crecimiento acumulado de la economía supera el 52 por ciento.
Producto de la crisis de fin del 2001, en el 2002 la economía se derrumbó un 10,9 por ciento piso del que comenzó a recuperarse.
Las primeras señales se tuvieron en el segundo semestre cuando comenzó a atenuarse el ritmo de caída hasta que en diciembre apareció el primer resultado interanual positivo (0,9 por ciento). A partir de allí se engarzan 61 meses de continua expansión.
En el 2003 se alcanzó una mejora de 8,8 por ciento, que continuó con subas de 9 por ciento en el 2004, 9,2 por ciento en el 2005 y 8,5 por ciento en el 2006.
En el 2007 el progreso económico se basó en tres pilares: el consumo, la industria y el campo. El sector manufacturero cerró el período con un crecimiento de 7,5 por ciento, apoyada en un fuerte avance de la industria automotriz que creció un 24 por ciento.
En lo que respecta al consumo, su influencia se observó claramente en la recaudación del IVA que tuvo un incremento de 33 por ciento en todo el período.
En tanto, la fortaleza del
sector agrícola quedó reflejada en el comercio exterior, ya de los 55.933 millones de dólares exportados, un tercio correspondió a productos originados en el campo.
Entre otros efectos, el crecimiento del 2007 genera que el 2008 tenga un piso de crecimiento (por arrastre estadístico) de al menos 2,5 por ciento. De esta forma, y tal como sucedió en años anteriores, la proyección de crecimiento de 4 por ciento con la que se realizó el presupuesto nacional resulta insuficiente, lo que ha despertado más de una crítica por parte de los analistas.
La consecuencia directa es una subestimación de la recaudación y por ende de los recursos con los que contará el Estado nacional, lo que generará ingresos adicionales que serán manejados discrecionalmente por el gobierno de Cristina Kirchner.
(DyN)
