CIPOLLETTI (AC).- Juan Manuel Aguirre dice que está tranquilo porque hasta ahora el juicio "está siendo positivo". Y se queja de la prensa porque considera que "no es ecuánime" y de la querella por "las bombas de humo".
"Yo estoy tranquilo. Hasta ahora todo se va desarrollando dentro de lo normal. Lo de mi ex novia Nancy Salinas (la joven que fue detenida por presunto falso testimonio) quizás fue sacado un poco de contexto. No voy a defender las contradicciones, pero sí voy a decir que es una mujer que estaba después de diez años en el lugar donde nunca se sienta, que nadie se ha sentado en el banquillo de testimonios, con el novio y la suegra atrás, siendo intimidada por las preguntas, con cierto tono de choque del abogado querellante sobre sus intimidades sexuales, sobre sus noviazgos, sus ex noviazgos, sus historias de ida y de vuelta", sostuvo el imputado en un contacto con LU19.
"Me parece muy lógico -justificó- que una persona bajo ese contexto tienda a equivocarse de alguna manera, a no decir a ciencia cierta cosas completas. Yo entiendo la denuncia por falso testimonio, pero hay que hacer la aclaración que el jurado le toma la denuncia por falso testimonio al fiscal y a la querella por unos dichos que tienen que ver con el día posterior al asesinato de Ana, que es la famosa entrega de la llave (del auto de Zerdán) por parte mía a la policía". La llave es la prueba más fuerte que toma la acusación en su contra.
"En su momento aclararé el hecho -continuó-, pero no hagamos con esto una nueva bola gigante, una nueva huella de dedo índice (la pericia contra su padre), porque sino es como que estamos vendiendo bombas de humo todo el tiempo. ¿Qué pasa?, ¿cuál es el problema?, una vez que se cayó la huella, como no hay nada ¿tenemos que hacer bombas?"
No respondió si el jefe de la Policía Víctor Cufré lo trasladó el 31 de diciembre al departamento de su padre, como denunció la querella. Sólo expresó que este episodio "será aclarado en su momento".
