Tras la polémica desatada por la visita del dictador africano al país, la presidenta Cristina Fernández le manifestó anoche su par de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema Mbasogo, su "honda preocupación por las violaciones a los derechos humanos en la nación africana.
"No puedo dejar de transmitir la honda preocupación por la situación denunciada por Naciones Unidas en cuanto a la situación de los derechos humanos en su país", dijo Cristina Kirchner dirigiéndose a su par invitado.
Y agregó: "El más importante convenio firmado hoy fue en materia de buen gobierno y derechos humanos, que para nosotros es un tema central".
Al parecer, la presidente se hizo eco de la ola de repudió que se generó ayer desde la oposición ante el anuncio de su encuentro con Mbasogo. La semana pasada había recibido en su despacho a otro golpista, Lino Oviedo, ahora candidato a presidente de Paraguay.
"Obiang hace casi 30 años que permanece en el poder en Guinea Ecuatorial, desde el golpe de Estado de 1979 y hoy la señora Cristina lo recibe con agasajos en la Casa de Gobierno. Éste es un hecho bochornoso para el pueblo argentino que todavía sigue esperando justicia por las aberrantes violaciones a los derechos humanos durante la dictadura en nuestro país", señaló ayer Pino Solanas, ex candidato a presidente por un partido de izquierda .
Cristina Kirchner firmó anoche con Mbasogo memorandos de entendimiento entre ambos países en distintas áreas, entre ellas, la profundización democrática y los derechos humanos, además de los intercambios en materia económica.
Más temprano, el canciller de Guinea Ecuatorial, Pastor Michá Ondó Bile, afirmó en Buenos Aires que la Argentina "es un país líder en cuanto a derechos humanos y Guinea Ecuatorial debe aprender de un país potencia de América del Sur".
"El desarrollo económico que han tenido en estos años es impresionante, y nosotros somos el país más joven de la comunidad hispanoparlante, por lo que tenemos mucho que aprender", agregó. (DyN y DPA)
