NEUQUÉN (AN).- Desde que asumieron, los integrantes del bloque mayoritario opositor de la Legislatura, la Concertación Neuquina, mantienen una estructura que une a justicialistas y radicales. Pero a partir del 1 de marzo, cuando en la Legislatura se reaviven debates clave, el PJ y la UCR enfrentarán la disyuntiva de definir un referente o trabajar por separado.
Por el momento designaron autoridades y ordenaron la tropa, respetando las pautas con las que se habían definido las listas. Sobre trece diputados electos, la UCR logró uno más que el PJ. Eduardo Benítez fue designado como presidente del bloque y Luis Sagaseta, un hombre del gobierno nacional en la provincia, como vicepresidente.
Pero también se definieron autoridades partidarias por separado. Por la UCR, Marcelo Inaudi, que repite en la banca y que cuenta con experiencia como diputado y por el PJ, Miguel Guidali, del Peronismo para la Victoria (un sector que responde a Oscar Parrilli, secretario general de la Presidencia).
Ariel Kogan cuenta con el plus de haber sido diputado durante la anterior gestión y que es otro de los justicialistas que puede liderar causas dentro de la Legislatura.
Inaudi, Jenny Fonfach, Gastón Contardi, Benítez, Juan Oltolina, José Luis Sáez y Cecilia Bianchi por la UCR; y Sagaseta, Kogan, Miguel Ángel Guidali, Amalia Jara, Miguel Lucero y Fanny Longo por el justicialismo, integran el espacio kirchnerista en la Legislatura.
Por el momento, las diferencias internas no son evidentes y la segunda minoría logró trabajar en conjunto.
Pero además de mantener la unidad interna, la Concertación tiene el desafío de captar a los otros dos bloques de la oposición. Alternativa Neuquina, integrada con la zapalina Soledad Martínez como presidenta; la dirigente de Ba
rrios de Pie, Paula Sánchez; y Hugo Gonçalves, quien hasta el momento alineó su trabajo a las decisiones del bloque. Rodolfo Canini, ex intendente de El Huecú, es el único diputado que logró Unión por los Neuquinos (UNE) en la Cámara y en lo que va de la escasa actividad de la nueva gestión, coincidió en trabajar por la unidad de la oposición.
En aproximadamente de 20 días,el recinto volverá a abrir sus puertas. Será la sesión preparatoria para la apertura del período ordinario, el 1 de marzo. El oficialismo, si bien cuenta con la mayoría necesaria para aprobar las leyes que Sapag necesita para las primeras medidas de gobierno (los diputados aseguran que se trata de entre 30 y 40 proyectos), intentará no imponerse a la oposición. Sería aceptar que, ante la necesidad, puede aprobar los proyectos con la polémica mayoría que le otorgó el acuerdo entre Sobisch y Sapag en noviembre pasado, cuando por la modificación del reglamento interno se redujo la mayoría de 19 a 18 legisladores.