Guillermo Coria cayó ayer dando un poco más de batalla, por 6-4, 4-6 y 6-3, ante el uruguayo Pablo Cuevas, en su regreso al circuito principal de la ATP. El 'Mago', quien ganó Viña del Mar en el 2001 y en los últimos meses jugó -con malos resultados- torneos challengers, dejó entrar a todos los fantasmas que lo persiguen desde hace un par de años, al perder por 6-4 el primer set y comenzar abajo el segundo.

El argentino, no obstante, regaló también algo de los golpes y el coraje que lo llevaron a la cima del tenis mundial. Cuando perdía 2-4 en el segundo set, remontó, igualó y venció 6-4, entre aplausos.

En el tercer set, Coria volvió a exhibir las complicaciones que lo hicieron desaparecer del deporte de elite. Cuevas no desaprovechó el regalo y remató el partido con un 6-3.

A pesar de la derrota en primera ronda, el tenista argentino calificó con "un nueve" su juego en el regreso al circuito ATP. "Quedé tremendamente satisfecho por el juego que entregué. Me parece que mi tenis no está tan lejos de lo que quiero. Creo que hoy (ayer) comienza definitivamente mi vuelta", dijo el santafesino, que no jugaba un torneo ATP desde agosto de 2006.