La causa por el escándalo de la valija que se sigue en la Argentina, y que se ha movido muy poco, tiene ahora un nuevo juez: Daniel Antonio Petrone. Fue designado por Cristina Fernández en el fuero penal económico, apenas asumió la presidencia en diciembre.

La determinación del magistrado se podrá medir con una sola acción, que precisamente es la que más inquieta a la Rosada: si cita o no a indagatoria a los funcionarios argentinos que acompañaban al maletero venezolano en el avión pagado por el gobierno. Se trata del presidente de la estatal Enarsa, Exequiel Espinosa, el ex titular del órgano de control de concesiones viales (Occovi), Claudio Uberti, y su secretaria privada.

Con 36 años, Petrone ya lleva siete como juez criminal en Lomas de Zamora y según publicó ayer "Clarín" es un referente entre los jóvenes juristas que impulsan reformas en la Justicia. "Entre quienes conocen sus fallos, algunos lo tildan de 'garantista' y otros de 'liberal moderno que no arriesga demasiado', pero todos lo reconocen como un trabajador y estudioso del derecho", sostuvo el matutino.

Fuentes judiciales destacaron la estrecha relación de Petrone con el procurador general de la Nación, Esteban Righi, con quien trabajó en proyectos de reforma judicial y carcelaria.

El nuevo juez fue durante una década profesor de la cátedra de derecho penal de Zulita Fellini, ex esposa de Righi, quien también le prologó su libro "Cárceles sanas y limpias".

Petrone postuló para el juzgado en lo Penal Económico 2, donde está como subrogante (provisoria) María Marta Novatti. Por allí pasó el caso de las valijas con droga de la aerolínea SW.