Las desventuras de Gastón Gaudio, versión 2008, comenzaron en Viña del Mar.
En el torneo chileno, que se ilusionaba con disfrutar de "otro Gato", se vio más de lo mismo. La crisis anímico-tenística que tuvo su momento cumbre el año pasado y que se extiende desde mediados del 2006, no se ha modificado en el campeón de Roland Garros en 2004.
Luego de la derrota en primera ronda ante Santiago Ventura (88 en el ranking) por 6-3 y 6-0, Gaudio admitió que es probable que se retire tras el ATP de Buenos Aires, que comienza el 18 de febrero.
A los 29 años, el único tenista argentino que pudo emular en parte al gran Guillermo Vilas, está cerca del adiós. El personaje de antihéroe, simpático al principio, se terminó por devorar al deportista, que hoy pena sin sentido ni brújula dentro de una cancha de tenis.
A diferencia de otras oportunidades, esta vez el 'Gato' ni siquiera reclamó o se enojó durante su presentación de ayer sobre la arcilla chilena y terminó admitiendo que el retiro es una posibilidad cierta. "No me sentí bien en todo el partido, y con un resultado así no me dan muchas ganas de seguir jugando. La verdad es que se me está poniendo muy difícil realizar buenos partidos y además la motivación ya no es la misma", reconoció Gaudio.
"¿Colgar la raqueta? Sí, es una posibilidad cierta", insistió el campeón de Francia '04. "Es probable -concluyó- que después del torneo de Buenos Aires tome una decisión definitiva", prosiguió al salir del Club Naval de Campo Las Salinas.
Gaudio, al igual que Guillermo Coria, llegaron al ATP de Viña del Mar con el objetivo de reverdecer los laureles que los llevaron a las cima del tenis mundial.
"No estoy de muy buen ánimo. Ya hace un año que estoy así y hoy por hoy no sé si tengo ganas de seguir luchándola para obtener estos resultados", explicó un atribulado Gaudio tras el partido.
El tenista porteño reconoció que su nivel de juego actual "es un desastre" y lo atribuyó a que "por ahí, después de 20 años jugando al tenis, capaz que la cabeza no me da para más. No tengo la fuerza que tenía cuando era más chico", admitió el ex Nº 5 del mundo.
Tras la caída con Ventura, el Gato fue crítico. "Estoy esperando a ver si puedo jugar bien, pero no se da y no entiendo. No es una buena etapa y ya estamos pensando más en dejar que en seguir", agregó.
