LAS GRUTAS (ASA).- Otra vez un grupo de adolescentes como blanco. Nuevamente dos personas a mano armada. Y en el mismo radio urbano, en pleno centro del balneario. Ésas son las conclusiones que surgen luego del asalto en el que dos sujetos obligaron a jóvenes que descansan en Las Grutas a entregarles celulares, billeteras y cámaras fotográficas.
Afortunadamente, de nuevo la violencia se limitó a frases fuertes y algunas amenazas, pero no hubo golpes ni lesiones.
Esta vez, las víctimas del sorpresivo atraco fueron nueve chicas de entre 22 y 23 años, la mayoría oriundas de San Antonio Oeste a las que se sumaban familiares y compañeras universitarias de Capital Federal y la provincia de Buenos Aires. La vivienda elegida fue la de los padres de Analía Izco, esposa del empresario inmobiliario local, Carlos Landivar, ubicada en Pichi Mahuida y Bariloche. Allí, Maite, la hija menor del matrimonio de prestadores, compartía un asado con amigas.
"Entraron por el portón, que cuando se abre hace mucho ruido, pero como teníamos la música fuerte no escuchamos", contó Maite ayer por la tarde todavía consternada. Los delincuentes tuvieron que atravesar el largo jardín del frente e ingresaron amenazando a las jóvenes que estaban sentadas a la mesa. Les pidieron todos los elementos chicos y de valor como anillos, cámaras, celulares y billeteras. "Lo más violento fue cuando uno le propuso al otro cortarle el dedo a una de las chicas porque no le salía el anillo, pero después no pasó nada", relató la joven.
Las quisieron encerrar en el baño pero no encontraron las llaves, por lo que las hicieron tirar al piso. "Arrancá el auto, le dijo uno a otro, pero me parece que andaban caminando porque si no se hubieran llevado cosas más grandes", afirmó Maite.
En cuanto a la apariencia de los delincuentes dijo que eran jóvenes y que llevaban anteojos.
La chica se quejó del accionar policial. "Dos policías estuvieron parados durante un largo rato frente a la casa como cuidándonos y cuando se van, entran los ladrones", contó la chica. Su padre, cuando arribaron los efectivos criticó su accionar fuertemente y ni siquiera permitió que se radicara la denuncia. "
El comisario Abel Echeverría dijo que la actitud de Landivar fue "fuera de lugar". Confirmó el robo y garantizó que se investigará de oficio todo lo ocurrido. Ayer, se produjeron varias detenciones y demoras en el marco de este robo que se suma al que ocurrió idéntico la semana pasada a dos cuadras de esa vivienda.
Preocupados por estos hechos, unos 50 vecinos reclamaron más seguridad a autoridades locales y provinciales, durante una reunión realizada por la tarde.
