El embajador chileno en Buenos Aires, Luis Mara, dijo ayer que la Cancillería argentina es demasiado flexible para firmar permisos cuando la justicia de Argentina investiga un presunto contrabando de automóviles utilizando vías diplomáticas.
"La Cancillería acá (en Argentina) es demasiado flexible. Quizás es eso lo que estén investigando. No es que le hayan presentado problemas (a los diplomáticos), sino todo lo contrario. Se lo firmaron sin problemas" dijo el embajador al diario El Mercurio, refiriéndose a dos miembros de la delegación chilena que compraron autos de lujo mediante un beneficio diplomático.
La legislación argentina permite la importación de vehículos para los miembros y funcionarios de las embajadas con valores que oscilan entre los 20.000 y 60.000 dólares según el cargo. Según el embajador, los dos ex funcionarios de la embajada chilena que son investigados por la justicia argentina, "no son diplomáticos ni personas designadas por la presidenta" y aseguró que la situación en su embajada es "transparente y sólida".