El sector de gobernadores e intendentes radicales "K" se reunirá en marzo próximo para debatir sobre la compleja situación que atraviesa la UCR y exigir a la cúpula partidaria, con la que se encuentran enfrentados, la normalización de la fuerza y la elección de nuevas autoridades.

Los radicales disidentes, que formaron parte de las listas del kirchnerismo en los últimos comicios, quieren "trabajar para recomponer la situación del partido desde adentro y buscar objetivamente que se arregle la situación", señalaron fuentes del sector.

El acercamiento al Gobierno de un grupo de gobernadores e intendentes, liderado por el vicepresidente Julio Cobos, y el fortalecimiento de la "Concertación plural" motivó una ruptura en el seno de la UCR y enfrentó a los "K" con la conducción partidaria, que lidera el jujeño Gerardo Morales. Las diferencias derivaron en la expulsión del partido de Cobos, la suspensión de la afiliación de varios dirigentes del sector como el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, o el senador Pablo Verani, y la intervención de algunos distritos clave como Mendoza, Río Negro o Corrientes. Los rebeldes buscan frenar las intervenciones y expulsión de afiliados -que comenzó durante el mandato de Roberto Iglesias al frente de la UCR-, e incluso el gobernador de Río Negro, Miguel Saiz, propuso la "afiliación cero" para encarar una profunda reestructuración en el padrón del partido.