NEUQUÉN (AN).- Si bien, como en la mayoría de los entes autárquicos y descentralizados del gobierno provincial en los que hubo cambio de autoridades, aún no cuentan con los números claros del legado de la administración del ex gobernador Jorge Sobisch, el objetivo de la nueva gestión para el Instituto Autárquico de Desarrollo Productivo (Iadep) es "transparentar" el funcionamiento del organismo.

Para esa tarea, el gobernador Jorge Sapag designó a un contador del sector privado, Claudio Gibezzi, que proviene de la industria petrolera. "Mi primera actividad es ver cómo están los números, qué se debe y qué está comprometido; pero fundamentalmente, qué hay por cobrar", explicó el titular del organismo. Es que uno de los objetivos de la nueva gestión será reforzar el recupero de los créditos otorgados.

"De las cobranzas surgen los recursos genuinos con los que contamos y, en realidad, este instituto debería manejarse de esa manera: para poder seguir prestando, tiene que cobrar", detalló Gibezzi. Confirmó que desde el primer día trabajó en reuniones con los principales deudores, entre ellos los bodegueros de El Chañar.

De las afirmaciones del funcionario se desprende que se endurecerá la postura con los deudores. "Los recursos hay que devolverlos en los plazos que se pactan", indicó el presidente del ente de financiamiento de la provincia, que si bien aclaró que no cuenta con un balance exacto de las cuentas ni con los niveles de cobrabilidad, insistió en que "fundamentalmente, tenemos que emprolijar todo lo que es circuitos y procedimientos para poder tener una gestión absolutamente transparente".

La preocupación de Sapag, trasladada a Gibezzi, por evitar las dudas acerca de los créditos otorgados por el Iadep está relacionada con el destino de los fondos del organismo. Es que, durante la gestión de Sobisch, se motorizaron préstamos por los que el ex gobernador manifestó oportunamente que "si eran para los amigos, mejor". Desde ese momento y por la imposibilidad de acceder a la información de muchos de los créditos otorgados y de los niveles de recupero, la transparencia nunca fue una característica del Iadep. El caso más emblemático es el de las bodegas de El Chañar, con grandes deudas por las que los titulares de los créditos fueron auxiliados con una refinanciación por 300.000.000 de pesos a principios del 2006. Al respecto, el titular del organismo dijo que "no hay una pauta definida para el tema bodegas, ni para ningún otro tema" y detalló que uno de los parámetros a revisar serán las garantías, "que si en algunos casos no son suficientes, habrá que volver a sentarse para poner todo en orden". Gibezzi ocupa el cargo que hasta el cambio de gestión perteneció a Rodolfo Kaiser, uno de los sobischistas reciclados por Sapag, en este caso, para la Subsecretaría Legal y Técnica. Pero Kaiser renunció a su puesto la semana pasada.