CENTENARIO (ACE).- Con la apoyo de los concejales, se inició ayer una asamblea abierta permanente a la comunidad en el hall central del hospital Natalio Burd para tratar y gestionar el pedido de estatización de cocina y limpieza. En el encuentro también se resolvió que no se autorizarán más internaciones.
En ese delicado escenario, un gusano apareció en el puré de una pediatra de guardia y se mandó a analizar a bromatología local.
La detección del invertebrado indignó a los trabajadores y cuando se supo que los pacientes cuando se enteraron de la situación varios dejaron de comer.
Los dirigentes gremiales pidieron explicaciones sobre la continuidad en la compra de viandas a una rotisería. Hasta ayer había veintitrés pacientes internados de los cuales quince llevan una dieta especial.
La ausencia de la directora María Elena Mondino fue justificada por el intento de resolver problemas en el sector de esterilización, donde también se denunció la falta de personal.
Una veintena de trabajadores de la salud iniciaron la asamblea en horas de la mañana para denunciar nuevamente que las viandas fueron elaboradas en el motel Sayhueque.
A la reunión se sumaron otras fuerzas con más reclamos. El Deliberante local estuvo representado por casi la totalidad de los concejales titulares.
También se presentó la referente del Servicio de Nutrición de la Zona Sanitaria I Silvia Reza quien pidió que se documenten todos los reclamos dirigiendo las notas a la dirección como al Servicio de Nutrición.
El presidente del Concejo Deliberante Oscar Nahuel le manifestó a los trabajadores que "el hospital depende del ámbito provincial y nosotros no tenemos ingerencia administrativa". Sin embargo aseguró que "acompañaremos y apoyaremos el reclamo para que estos servicios los maneje otra vez el Estado".
Nahuel destacó que "desde ahora se deben discutir los problemas de fondo en el hospital, porque si seguimos tapando con parches vamos a seguir lidiando con estos problemas".
El médico Juan Pablo Pagasartundua mostró su preocupación porque"al servir este tipo de comidas, al autorizar las internaciones en estas condiciones arriesgamos nuestros títulos".
La médica de guardia de Pediatría, Ada Ortiz ratificó la decisión que "de ahora en más, si no hay comida adecuada, no vamos a autorizar nuevas internaciones" y recordó que "el 20 de diciembre
-cuando arrancó el problema- nos trajeron comida con queso, sin cubiertos, trasportada en la ambulancia, al sol y envuelta en papel madera". También, la delegada de ATE Gabriela Arévalo afirmó que "la directora no nos había recibido todavía y tenemos para hacerle varios planteos" y detalló que "debe dar explicaciones sobre la reasignación nuevos puestos a mucamos y camilleros que mandaron a distribuir la comida cuando se supone que debe haber una orden por escrito, porque ante algún accidente, cae la responsabilidad en los nutricionistas". La enfermera María Laura Ávila alertó sobre la falta de leche de fórmula para bebés: "estamos con la incertidumbre de no saber que pasará cuando se nos terminen las cajas", dijo.
Por la tarde, el subsecretario de Salud Claudio Ferrón anunció el pago de un tercio de la deuda a las empresas proveedoras de las viandas. La provincia les debe un millón de pesos.
