Desde que regresó de Japón, Juan Román Riquelme no había hablado. Pero su silencio se interrumpió ayer, cuando dio una entrevista al programa Un buen momento, de radio La Red. Duro en sus declaraciones y hasta con la bronca de la final perdida en Japón, Riquelme repartió críticas. Pero también hizo autocrítica. Les bajó línea a sus compañeros y hasta les pegó a los propios hinchas de Boca.
"Lo importante es que Boca llegue bien al torneo. Uno siempre quiere ganar, pero los torneos de verano no cuentan. Hay que defender el título que se acaba de ganar que es la Copa Libertadores. Siempre quiere ganar uno, más con la camiseta que tenemos. Más con lo que le pasó a Miguel. En seis meses ganó la Copa y a los otros seis meses se tuvo que ir. Los hinchas son muy exigentes y uno siempre tiene que ganar todo", empezaba a calentar con sus primeras declaraciones.
Después se mostró molesto por la partida de Russo: "Me tocó vivir una situación medio rara. Cuando me fui estaban todos felices porque habíamos ganado la Copa Libertadores. Y ahora volví y no sé lo que habrá pasado con el técnico en esos cinco meses, porque se decían muchas cosas de él y al final se tuvo que ir". Más tarde llegó el turno de River. "Si al hincha de Boca uno le decía, cuando empezaba el 2007, qué torneo quería ganar, iba a decir la Copa Libertadores. Y a mí me dirán loco, pero prefiero ganar la Libertadores siempre y perder todos los clásicos. Yo lo entiendo así y lo digo por mi club. La gente de Boca está muy exigente".
Lo más fuerte llegó cuando le preguntaron si pensaba que Boca necesitaba refuerzos. "Cuantos más jugadores de primer nivel haya, más fácil va a ser para el técnico armar el once para cada domingo. Y también va a ser bueno para el plantel. Porque todos se van a tener que romper el culo, en el buen sentido, para ser titulares. Pero son Ischia y su ayudante los que tienen que pensar en refuerzos", disparó Román. Y siguió... "Los jugadores estaban muertos después del partido con el Milan. Y en el plantel hay varios jugadores que ya han ganado varias cosas. Hay que ver si en este año se quieren tomar revancha", apuró.
Pero donde más énfasis puso fue cuando tuvo que volver a hablar del tema Guillermo: "Yo me tuve que bancar que dijeran que no lo quería a Guillermo. Y por lo que sé, Barros Schelotto va a seguir jugando al fútbol. Entonces los periodistas están poniendo palabras que no existen. Ni siquiera le creyeron a Pompilio (Pedro, presidente de Boca) cuando dijo que no había hablado conmigo". O sea, un Riquelme durísimo.