LAS GRUTAS (ASA)- Casi 15.000 personas ingresaron en los últimos días a esta villa turística y ocuparon alrededor del 70% de la oferta de alojamiento dispuesta para esta temporada. Se calcula, que más de 22.000 plazas se explotarán este verano, al menos contemplando las que la Secretaría de Turismo tiene relevadas oficialmente.

El primer día del año mostró un balneario colmado en sus playas céntricas desde la Bajada Cero hasta más allá de la Séptima. Y también los puntos más distantes, como Las Piedras Coloradas y La Rinconada fueron muy convocantes en esta primera jornada de 2008, en la que se sumaron además de los veraneantes de otras latitudes, los recreacionistas de la zona que aprovecharon el feriado de Año Nuevo.

El cambio de horario genera que los bañistas puedan permanecer junto al mar hasta más de las 22.

En tanto, en la despedida de 2007, el movimiento comercial fue impresionante. Quienes arribaron con el tiempo justo para hacer las compras o aquellos que se demoraron en decidir su menú, debieron penar para conseguir un buen corte de asado, pan fresco o buenas verduras. Las provisiones de los comercios apenas dieron abasto para satisfacer la gran demanda y muchos optaron por salir a buscar sitio en los restaurantes, la mayoría de los cuales se preparó especialmente para esa noche festiva.

A los que habían abierto para Navidad, se sumaron otros que, sabiendo del aluvión de visitantes que se preveía para estos días, incorporaron personal y pusieron todo para recibir a los visitantes. El consumo se multiplicó este verano considerablemente, lo que a pesar del cansancio por el trabajo continuado e intenso, provocó interesantes expectativas y mejoró el humor de los comerciantes.

La noche del 31 se transformó en una gran fiesta colectiva. Los restaurantes lucieron llenos y además en muchas viviendas se reunieron familias para despedir el año y recibir el que comienza, esperando para la medianoche el show de fuegos artificiales que es ya un clásico en esta fecha.

Por eso, no fueron pocos los que eligieron recibir el Año Nuevo en la Costanera o en la playa, para observar claramente el espectáculos de luces, color y sonido que invadió el golfo San Matías durante los 15 minutos que duró el acontecimiento que cada año organiza la Cámara de Turismo de Las Grutas y San Antonio.

Por su parte, la pirotecnia adquirida por particulares, que cada día se vende en mayor cantidad y obtiene mayor potencia y luz -más allá del riesgo que implica-, continuó durante más de una hora iluminando el cielo sobre la villa turística.