VIEDMA (AV)- La recuperación del vínculo incierto entre chacareros e intermediarios frutícolas fue planteado como prioritario por el ministro de la Producción, Juan Accatino. Igual reclamó la férrea defensa del Plan Integral Frutícola por parte de los legisladores rionegrinos en el Congreso y se mostró preocupado por el futuro de la ganadería afectada por la sequía.
También puso en dudas sobre que las pérdidas en la cosecha de peras y manzanas alcancen un 30%.
"En el sector frutícola se perdió la confianza porque el productor siempre piensa que lo perjudicaron en la liquidación (de sus ventas), por lo tanto hay que recuperarla a largo plazo", sentenció el ministro Accatino en un diálogo con "Río Negro".
El área frutícola "es súper-dinámica" con lo cual "se puede legislar para poner coto" a la distorsión, aclarando que las leyes "no remplazan la confianza".
Destacó que Río Negro participó de tres misiones externas organizadas por el Consejo Federal de Inversiones (CFI) destinadas a empresarios, productores y funcionarios, pudiéndose comprobar que "en todos lados, el que manda es el mercado, la fruta se entrega en consignación y a nadie se le ocurre afectar los pagos del productor".
Defendió el Plan Integral Frutícola (PIF) en el sentido de que su impacto generará herramientas de control sobre las operaciones en toda la cadena. La intención, será a su criterio, verificar a cuánto se vende la producción y cómo se obtiene el costo del productor desde que las peras o manzanas llegan a la góndola con un determinado precio.
Accatino reconoció que lo actuado en el marco del PIF hasta redactar un proyecto de ley nacional "no es fácil" porque la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) tuvo que aceptar que un 5% de una eventual reducción de las retenciones a las exportaciones "vuelvan (exclusivamente) para calzar el financiamiento del plan".
Estimó que de prosperar la iniciativa habrá 50 millones anuales para los pequeños y medianos productores, aunque planteó que habrá que hacer urgentes gestiones en varios frentes.
"Que Nación respete"
"Desde el Poder Ejecutivo rionegrino -apuntó- tendremos una batalla por delante en los próximos cuatro años porque necesitamos que el actual ministro de Economía, Martín Lousteau, respete lo acordado (sobre el financiamiento) con su antecesores Felisa Miceli y Miguel Peirano".
Sentenció que "nosotros vamos ir por todo, es decir que nos devuelvan los cinco puntos de las retenciones" tras lo cual preguntó si el nuevo gobierno nacional "respetará lo que se pactó anteriormente" y qué actitud tomarán los diputados y senadores rionegrinos". Insistió en que "los quiero ver (a todos) defendiendo el plan, en virtud de que la recaudación por las retenciones son impuestos nacionales no coparticipables" y por lo tanto deben entender esa cuestión.
Consideró que la temporada se presenta "como buena" y relativizó la posición de la Federación de Productores de Fruta, que habla de una merma del 30%. "Yo quiero ver primero" si las pérdidas serán tales o a la mejor será así aunque "con mayor calidad y mejores precios".
Al preguntársele cómo están las relaciones con las nuevas autoridades nacionales, respondió que "dimos una señal en el reacomodamiento del gobierno provincial, y sobre todo para favorecer a un sector que es el más comprometido como el ganadero".
Relacionado con esa cuestión explicó que "pusimos un par frente a otro", en referencia a la ligazón existente entre el secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos, Javier de Urquiza, con el presidente de la Federación de Sociedades Rurales de Río Negro, Daniel Lavayén, nombrado recientemente secretario de Producción dentro de la cartera productiva.
El ministro rionegrino analizó que las pérdidas en la ganadería -que se estiman en 120 millones de pesos- como consecuencia de la sequía "no las podremos compensar con nada". No obstante, anunció que habrá recursos genuinos por unos seis millones de pesos originados en la Ley Nacional 25.422 de Apoyo a la Ganadería Ovina y el Plan Ganadero Nacional.
