Uno de los ingenieros que trabajó en el análisis de la telecabina Amancay aseguró que las razones de este y otros centenares de accidentes que ocurren en Argentina tienen relación con una falta de cultura para realizar en tiempo y forma el mantenimiento de los equipamientos. "Realizar un buen mantenimiento es costoso, y en la mayoría de los casos hay escasez de presupuesto para hacerlo", sentenció.
En sintonía opinó el ingeniero austríaco August Zingerle, de prestigio internacional, quien fue contratado por CAPSA para supervisar sus protocolos de seguridad y mantenimiento. Hace más de un mes, cuando visitó Bariloche, reconoció que en los últimos años el control y el mantenimiento de los medios de elevación varió sustancialmente en Catedral y que los sistemas son iguales a los que tienen lugar en Europa, donde indicó, también ocurren accidentes.
No obstante, en Catedral hubo muchos años en que se hacía poco mantenimiento, por falta de recursos, lo cual generó falta de hábito y precisión para hacerlo. Tal vez por ello, un operario ajustó mal las mordazas de la aerosilla Cuádruple y otro uso una grasa inadecuada en la telecabina Amancay.
Similares deficiencias pueden verse en los ferrocarriles, en colectivos, etc.